El obispo de San Sebastián, José María Uriarte, ofreció ayer una conferencia (no episcopal, aun proviniendo de un obispo), en la que expresó su "cercanía" y "sensibilidad" hacia los familiares de presos etarras que "sufren" como consecuencia de los desplazamientos que han de realizar para visitarlos. Y añadió que, siendo consciente de la incomprensión que originarían sus afirmaciones, éstas son necesarias por motivos de "misericordia".
Misericordia. Más bien miseriacordial; cordial con familiares de terroristas, en muchos casos (quizá en todos; no recuerdo condenas por su parte) aprobadores de los métodos asesinos empleados por los condenados. Ah, pero el terrible sufrimiento que ocasiona un viaje, merece compadecimiento y piedad.
Desconozco si efectuó, o ha efectuado alguna vez (publicada no está), declaración alguna acerca del sentimiento que suscita en él el dolor de los familiares de las víctimas. Ésos que ni siquiera pueden sufrir el padecimiento de un desplazamiento para visitar a un vivo: todo lo más, una tumba. Ésos a quienes, de los condenados a muerte por ETA, sólo les queda el recuerdo.
Ignoro si mostró, o ha mostrado alguna vez, misericordia hacia las propias víctimas, las vivas obligadas a sufrir vitaliciamente las consecuencias de un atentado. Éstos sí constituyen verdaderos e inicuos sufrimientos; ellos sí son inocentes sufridores de la atrocidad e inhumanidad ajenas.
En mí, las palabras de Uriarte, no generan incomprensión sino indignación, asco, repudio. Las víctimas no se encuentran a la misma distancia que los terroristas o sus familiares de un punto cero ecuánime. ¿O los familiares de quienes sometieron a Cristo a su Pasión, Crucifixión y Muerte eran equiparables, en su sufrimiento, al del propio Cristo o María?. Si aceptaban sus actos, no en ningún caso.
Ampararse en "razones humanitarias" para defender los acercamientos, como Rubalcaba y el Gobierno Zapatero para excarcelar a De Juana, es simplemente deleznable.
¿Por qué lo circunscribe a presos etarras?, ¿no sería aplicable la misma tesis para cualquier otro encarcelado?, ¿o sólo le inspiran misericordia los familiares de terroristas?.
Y lo que resulta absolutamente inaceptable es plantear el terrorismo etarra como una cuestión política. Habiendo muertes, no hay lugar para la política. Tratándose de criminales, no cabe diálogo alguno. A quienes portan y emplean armas, coacción, extorsión, persecución, a quienes imponen el terror entre sus congéneres, no se les puede denominar "adversarios políticos". Ni la esencia, ni el accidente: son asesinos.
Mientras la respuesta a la palabra siga siendo un disparo, una amenaza, un incendio, o cualesquier otro acto de violencia, la contrarrespuesta será la cárcel. Abierto tienen, y siempre lo han tenido, el camino que seguimos los demás. Si no lo toman, no pueden constituirse, en modo alguno, en compañeros de viaje.
¿Olvida, señor obispo, el quinto mandamiento: no matarás?. ¿o lo relega a un segundo, tercer, o desaparecido plano?. Quitar la vida a otro contraviene no sólo la ley de los hombres, también la ley de Dios. Es un delito, y un pecado, mortal. La pena es la cárcel; se les han concedido magnánimos beneficios penitenciarios, y no han cambiado. Para el perdón es inexorable la presencia de tres premisas: reconocimiento de culpa, arrepentimiento y propósito de enmienda. Ninguna de ellas existe.
¿Cuándo nos alentará la Conferencia Episcopal con, al menos, una matización expresa de los términos, un rechazo de las condiciones en que Uriarte propone misericordia?. Sólo inspirarían clemencia los familiares contrarios a la acción terrorista. ¿Cuándo nos satisfará con una advertencia, una sanción, una exigencia de cambio de discurso a Uriarte?. ¿Cuándo actuará el Nuncio dando traslado a Benedicto XVI?. ¿Cuándo recibiremos un mensaje de compasión hacia los que sufrimos que, desde un miembro de la jerarquía eclesiástica, se llame adversarios políticos a unos asesinos impíos?.
natpastor@gmail.com
Misericordia. Más bien miseriacordial; cordial con familiares de terroristas, en muchos casos (quizá en todos; no recuerdo condenas por su parte) aprobadores de los métodos asesinos empleados por los condenados. Ah, pero el terrible sufrimiento que ocasiona un viaje, merece compadecimiento y piedad.
Desconozco si efectuó, o ha efectuado alguna vez (publicada no está), declaración alguna acerca del sentimiento que suscita en él el dolor de los familiares de las víctimas. Ésos que ni siquiera pueden sufrir el padecimiento de un desplazamiento para visitar a un vivo: todo lo más, una tumba. Ésos a quienes, de los condenados a muerte por ETA, sólo les queda el recuerdo.
Ignoro si mostró, o ha mostrado alguna vez, misericordia hacia las propias víctimas, las vivas obligadas a sufrir vitaliciamente las consecuencias de un atentado. Éstos sí constituyen verdaderos e inicuos sufrimientos; ellos sí son inocentes sufridores de la atrocidad e inhumanidad ajenas.
En mí, las palabras de Uriarte, no generan incomprensión sino indignación, asco, repudio. Las víctimas no se encuentran a la misma distancia que los terroristas o sus familiares de un punto cero ecuánime. ¿O los familiares de quienes sometieron a Cristo a su Pasión, Crucifixión y Muerte eran equiparables, en su sufrimiento, al del propio Cristo o María?. Si aceptaban sus actos, no en ningún caso.
Ampararse en "razones humanitarias" para defender los acercamientos, como Rubalcaba y el Gobierno Zapatero para excarcelar a De Juana, es simplemente deleznable.
¿Por qué lo circunscribe a presos etarras?, ¿no sería aplicable la misma tesis para cualquier otro encarcelado?, ¿o sólo le inspiran misericordia los familiares de terroristas?.
Y lo que resulta absolutamente inaceptable es plantear el terrorismo etarra como una cuestión política. Habiendo muertes, no hay lugar para la política. Tratándose de criminales, no cabe diálogo alguno. A quienes portan y emplean armas, coacción, extorsión, persecución, a quienes imponen el terror entre sus congéneres, no se les puede denominar "adversarios políticos". Ni la esencia, ni el accidente: son asesinos.
Mientras la respuesta a la palabra siga siendo un disparo, una amenaza, un incendio, o cualesquier otro acto de violencia, la contrarrespuesta será la cárcel. Abierto tienen, y siempre lo han tenido, el camino que seguimos los demás. Si no lo toman, no pueden constituirse, en modo alguno, en compañeros de viaje.
¿Olvida, señor obispo, el quinto mandamiento: no matarás?. ¿o lo relega a un segundo, tercer, o desaparecido plano?. Quitar la vida a otro contraviene no sólo la ley de los hombres, también la ley de Dios. Es un delito, y un pecado, mortal. La pena es la cárcel; se les han concedido magnánimos beneficios penitenciarios, y no han cambiado. Para el perdón es inexorable la presencia de tres premisas: reconocimiento de culpa, arrepentimiento y propósito de enmienda. Ninguna de ellas existe.
¿Cuándo nos alentará la Conferencia Episcopal con, al menos, una matización expresa de los términos, un rechazo de las condiciones en que Uriarte propone misericordia?. Sólo inspirarían clemencia los familiares contrarios a la acción terrorista. ¿Cuándo nos satisfará con una advertencia, una sanción, una exigencia de cambio de discurso a Uriarte?. ¿Cuándo actuará el Nuncio dando traslado a Benedicto XVI?. ¿Cuándo recibiremos un mensaje de compasión hacia los que sufrimos que, desde un miembro de la jerarquía eclesiástica, se llame adversarios políticos a unos asesinos impíos?.
natpastor@gmail.com
40 comentarios:
¿Por qué siempre hablan de los derechos humanos de los terroristas y de sus familiares? , ¿por qué no hablan de los derechos humanos de los huerfanos,de las viudas,de esas familias rotas por la barbarie nacionalista y criminal?.
Es vergonzoso el silencio de la Conferencia Episcopal con Uriarte,querida Natalia,como lo fue antes con Setién.
Es inaceptable como católicos, que alguien que toma posturas filoterroristas continúe ni un segundo más al frente de una diócesis,sin que sea advertido o excomulgado.
Si los familiares de los asesinos encarcelados sufren mucho cuando viaja, que se jodan y bailen. Si por mí fuera, no tendrían que ir mucho más alla de Polloe, que es donde está Goyo Ordoñez enterrado. Y no irían más allá porque, si por mí fuera,´hubieran sido electrocutados para pagar por sus crímenes. En cuanto al obispo Uriarte, como antes Setién, o Blazquez, o Cirarda, no me merece otra cosa que desprecio. Baboso, melífluo, farsante sepulcro blanqueado, sentina de doblez, afeminado y viscoso personajillo bajo cuya sotanta quizá quepa una pistola. Me asquea. Y me asquea profundamente una Iglesia incapaz de expulsar de sí a una víbora como esta.
Si de derechos humanos se trata, deben defenderse los derechos de todos los presos,(no sólo de los terroristas de ETA), que están desparramados por España y lejos de sus Comunidades y localidades de origen.
Pero la Iglesia no lo hace.
Y es ahí donde radica al perversión de Uriarte:en que su mensaje tiene ese tufo filoterrorista,que como dice Sempietnos, nos remonta a Setién y a esa gran parte de la Iglesia vasca que se negaba a dar funerales y misas a las víctimas, o que incluso apoyaba,respaldaba y protegía a los asesinos.
Esto demuestra,Natalia, hasta que punto está podrida la sociedad vasca, y cuanto es de necesario ese aire de regeración que supondrá la salida de los nazionalistas filoterroristas del PNV del Gobierno vasco.
La inmensa mayoria de esas familias que tanta pena le dan a Uriarte, se siente orgullosos de lo que han hecho sus hijos,de los asesinatos que han cometido, y lo que desean es que salgan para que vuelvan a la "lucha armada".
Como católica no puedo si no sentir vergüenza y asco, a que personajes tan siniestros como este Uriarte,formen parte de la Iglesia.
Me ha parecido muy bueno tu post.
Lástima que la Iglesia no sea más, digamos, "ejecutiva" en según que acciones. Sus tiempos son otros pero seguro que les duele como a tí y a mí las declaraciones que debe de hacer más de 20 años este hombre que debe de tener alguna tara para no ver claramente ese tipo de asesinatos...
Coincido con Sempietnos que deberían excomulgarle... pero, "Doctores tiene la Iglesia".
un beso,
Natalia;es que siempre los han cobijado bajo las sotanas.
esa es la ignominia de la Iglesia vasca y el silencio cómplice de la Conferencia Episcopal que no llama al orden a esta gentuza.
Pues yo estoy de acuerdo con las palabras de Uriarte, y disiento de lo que aquí comentais.
Nada dicen Uriarte a favor de los asesinos de ETA. Se limita,como cualquier cristiano de corazón, a pedir que no sean sus familiares los que tengan que pagar las consecuencias de los errores de los presos.
Por otra parte condena los crimenes de la banda terrorista sin paliativos y aboga no solamente para que dejen las armas, si no por su total y definitiva desaparición como el único camino para que la paz verdadera llegue a Vascongadas.
Me parece que sois injustos con Uriarte,que no tiene nada que ver con Setién.
FRANCISCO:
Es más duro,terrible y desolador, recorrer sólo cinco metros hasta el cementerio donde está enterrado el hijo o el hermano que han asesinado, que recorrerse media España en un autobús proetarra engalanado con banderas batasunas,pancartas,cargados de "txakoli" y sabiendo que cuando lleguen a su destino, van a ver a un hijodeputa,pero hijo al fin y al cabo,y frente al que no tienen que arrodillarse ante una lápida y poner un ramo de flores.
No comprendo el silencio de sus superiores en Roma.
Es escandaloso.
No me gusta hablar mucho de este tema, estimada amiga, pero desgraciadamente llevas la razón.
Todavía no entiendo porqué cuando habla Rouco hace polñitica y cuando hablan estos curas favorables a los asesinos y sus intereses, nadie abre el pico.
Hasta en esto andamos con doble vara de medir desde dentro del seno de la propia iglesia.
Consecuencia: la gente ve hipocresía y cada vez crece más el número de creyentes que dejan a la iglesia tirada.
Abrazos.
Francisco:
Sólo faltaba que no condenara los crímenes.
A favor de los terroristas dice que son "adversarios políticos". Analiza el significado de esas palabras. Los únicos que traducen el terrorismo en una cuestión política son los terroristas o filoterroristas, porque subyace la consideración del terrorismo como forma de hacer política.
Con relación a los familiares comparto tu opinión. Por eso excluyo a los que repudian esos actos, que tienen doble sufrimiento. Pero, ¿cuántos hay de ésos?.
Mientras los asesinos sigan vivos, y los asesinados sigan muertos, hay una diferencia insalvable que deslegitima cualquier intento de equidistancia. No hay más que añadir. Uriarte es un perfecto bandido y la iglesia vasca (llevo mucho tiempo diciéndolo) es precismática. Desde Roma no se le pone los puntos porque no se fían de por dónde vayan a salir. Creo que se imaginan un Colegio Cardenalicio y sede papal en Loyola.
El clero vasco, como los jueces vascos, la policía vasca y casí todos allí se contaminan de la basura por miedo. Es así de sencillo.
Sr. Moltó, cómprese un chándal p`a la trena
Éste Saint Just de la democracia ingresó en el partido socialista en 1976, es decir, es un camisa nueva afiliado al PSOE tras acabar la dictadura, y pasó a la historia de las finanzas de España por largar al Sr. Rubio la frase “Míreme a los ojos, D. Mariano, si todavía le queda algo de vergüenza”.
Ruiz Mateos, Mario Conde, nombres famosos que acabaron pasando por la trena como debería hacer pronto el Sr. Hernández Moltó y su consejo de administración, presuntos autores del despelote que ha llevado la CCM al desastre y buen ejemplo de lo que significa dejar las cajas en manos de los partidos y los sindicatos.
Ya está bien de mentiras, de acumular engaño tras engaño, Sr. Zapatero. Ahora, tras año y medio de ser empujados a la ruina por este gobierno de incapaces y sus cómplices, ya no bastan las dimisiones. Son demasiados desmanes.
Que comience la cacería y, el que lo haya hecho mal, el que se lo haya llevado para él, para el partido o a medias, a la cárcel.
Por hijoputas. Por arruinarnos a todos. Luego a privatizar las cajas y a buscar un gobierno de hombres honrados. Si queda alguno en España.
Sr. Moltó, cómprese un chándal p`a la trena
Menudo problemón: tener que viajar para ver a un familiar. Al menos lo ven y no tienen que ir a llevar flores al cementerio. Su Ilustrísima podía ser igual de "valiente" y excomulgar a los parlamentarios guipuzcoanos que voten a favor del aborto (motivo de excomunión fulminante).
Anda que no hay personas que tienen que trabajar por una basura de salario a cientos de kilómetros de su familia de por vida. ¿Esto no le da pena?
En fin, otro garbancero más.
Como bien escribe Natalia, este sinvergüenza dice que reivindica el valor del dialogo como instrumento "insustituible para resolver cualquier conflicto", creo que en el País Vasco no existe ningún conflicto solo una pandilla de ..., que intenta a base de asesinatos a sangre fría imponer sus ideas de terror. La unica cercanía y sensibilidad del este monaguillo e tres al cuarto debería ser con las familias que tienen a seres queridos enterrados. Además reclama que "unos y otros" acepten "un recorte en sus aspiraciones" políticas "para llegar a un acuerdo entre todos, que sea garantía de la paz justa". Vamos que más transparente no puede ser el de negro. Estos son los graves errores que comete la Iglesia, no cortar de raíz, por eso muchas personas se alejan de la Iglesia, porque estas sinvergüenzas manchan lo bueno que puede haber en la palabra de Dios (y lo digo yo, que no soy creyente).
Un saludo y felicidades por el post, magnifico
Este va al infierno. Perdón, que dijo Juan Pablo II que no es un lugar físico. Se irá de pinchos con quien yo me sé.
Esta actitud de un sector de la Iglesia no es única en Vascongadas y en relación con el terrorimo etarra;ocurrió lo mismo en Irlanda,país católico por antonomasia,con el respaldo al IRA y a los terroristas.
Tanto es así, que sacerdotes irlandeses se negaban a oficiar funerales a soldados británicos católicos asesinados en atentados.
La perversión era tal, que el gobierno británico se dirigió al Vaticano,entonces bajo el papado de Juan Pablo II,protestando formalmente, y no recibió respuesta alguna.
A mi lo que me deja estupefacto ante estas actitudes,es la celeridad con la que se excomulgó o sancionó a teólogos de la liberación(cosa lógica,por otra parte,todo sea dicho)como Leonardo Boff o Ernesto Cardenal, y la "manga ancha" que se gasta con esta caterva filoterrorista.
Mi opinión va en la linea de Guti.
Sólo hay que recordar al sacerdote católico irlandés Alec Reid,de gira en el País Vasco,cuando se posicionó junto a Ibarreche apoyando la negociación con ETA en el proceso de Zapatero, y despreciando a las víctimas a las cuales exigía "generosidad".
Sería interesante analizar como es posible que miembros de la Iglesia se posicionen,apoyen o sean tolerantes,y a veces hasta cómplices,con asesinos terroristas.
Es terrible.
Monseñor: ¿ para cuando deja su eminencia, consolar a uno de los muchos niños que han llorado y lloran por la muerte de su padre, a veces delante de ellos? ¿ una sola de sus lágrimas no le importan? Espero que sí, recapacite y rectifique. Naranjito
Coincido especialmente con Cartas Marruecas (que sabe de qué se habla), y no me extrañan en absoluto lo que digan los obispos vascos porque son los cínicos amparadores de los etarras, ya desde que se creó la banda.
En las tres provincias vascas los pocos curas que se han opuesto a la consigna nacionalista, han sido depurados y obligados a callar, con el silencio cómplice del Vaticano.
Todo el clero es secesionista aquí,y quien no lo era anterioremnte ahora simula serlo y mucho, porque se expone a la soledad, la marginalidad y la prohibión de escribir o publicar ni en hojas parroquiales.
Los creadores de ese ambiente, desde 1980, son Setién (antes falangista en tiempos de Franco), y los sucesivos obispos de las tres provincias. Hasta el BLAZQUEZ que llegó de Palencia o de por ahí con el candor de un obispillo empollón y medio marica, se ha transformado en un par de años en más nacionalista que Arzalluz. Son los garbanzos (la sotana morada), imbécil, que diría aquel.
A ver si de una vez por todas la Iglesia se pronuncia en contra de este tipo de señores. Las sotanas cubren, pero no camuflan a las malas personas.
En relación con lo que comentan Guti y Julio Andradas,recuerdo estas alucinantes declaraciones del sacerdote Reid,que ponen los pelos de punta.
No logro comprender,como miembros de la Iglesia,tanto en Irlanda como en España,pueden dar cobertura,comprensión y respaldo a asesinos terroristas.
Tenéis dos premios en mi blog, los Premios Symbelmine y el Red Hispania "al amor a España".
Podeis pasar a recogerlos cuando querais.
Natalia, cuando he visto tu entrada de hoy me he sentido bien de saber que aun quedan gente que se acuerdan de las victimas, hoy yo me siento huerfano de la iglseia, Donde está?, o acaso este es un tema que solo afecta a unos cuantos.
Cómo chochea el Obispo. A mí también me dan arcadas. Sinceramente, yo le daría dos guantazos bien dados, para que aprendiera lo que es la misericordia. A mí la familia de los etarras y sus molestias, me la refanfinflan. ¡Cuánta cobardía la de este cureta progre! Es cierto que debería promover la excomunión de los abortistas, en vezde decir payasadas escandalosas.
Me considero Catolico,pero tanto a este descerebrado como al incalificable Setien,los repudio y reniego de su religiosidad a favor de las personas de bien.
Cuando todos conocemos que los asesinos de eta se fraguaron bajo las sotanas de los clerigos de las vascongadas.
Ademas este tipejo fue un activo en la rendicion del Psoe,en contra de Eta,ya que estuvo en las negociaciones.
Por si fuera poco,La abogada de la formación ilegalizada Batasuna,es Jone Goiricelaya sobrina a su ver de este mal nacido.
Saludos
Me resisto a pensar que el Sr Obispo represente el sentir general de los católicos del País Vasco.
No me gusta personalizar y menos en el caso de la Iglesia.
Vamos a dejarlo en un comentario desgraciado o poco oportuno y a ver si procuramos calmar los ánimos que estas cosas ayudan muy poco.
Uno puede compadecerse de los familiares de los etarras, siempre que deje clara su condena y no haga malabarismos dialécticos para no llamar a las cosas por su nombre.
Uno puede compadecerse de los familiares de los etarras, siempre que deje claro que el ambiente en el que han nacido y se han criado han sido propicios para crear asesinos. Que estos familiares que tanta misericordia le despiertan no rechazan con dureza los actos de los etarras; no rechazan el ambiente que genera el caldo de cultivo del nacionalismo excluyente, condenado por la Iglesia.
Uno puede tener misericordia, pero no de esta forma. Porque a ver si el problema va a ser que tengan que viajar para visitar a los asesinos dispersos por España y ello les obligue a pisar las benditas tierras que tanto odian.
Por otro lado los obispos no tienen superiores jerárquicos. La Iglesia no corrige individualmente a los obispos a no ser que su comportamiento sea escandaloso o sea causa de excomunión. Hay muchos obispos que deberian ser reprendidos por cosas más serias y tampoco sucede. Los obispos son iguales entre ellos.
Sería de la opinión de Francisco si
considerara a esos curas justos y sinceros porque, aunque condenen los asesinatos (faltaría más), deberían estar contínuamente denunciando en la Iglesia, ante todos sus feligreses, las injusticias que se cometen a diario en el Pais Vasco con todo aquel que huela a maqueto, y no lo hacen; me viene a la memoria aquel sacerdote que emigró a la fuerza por español (lamento no recordar el nombre). Cuesta creer que unos buenos padres puedan perdonar a un hijo que, habiendo cometido esos estragos y no arrepintiéndose le perdonen y sufran porque no pueden visitarle con frecuencia. ¿Cuántos padres o familiares de estos asesinos se han dirigido públicamente a las víctimas para pedirles perdón y solidarizarse con ellas?
Estoy de acuerdo con García Francés, la sociedad vasca tiene miedo y muchos curas también. Allí sólo pueden alardear públicamente de su patriotismo los escoltados.
La ETA nació en un seminario con la ayuda de algunos beatos burguesillos nacionalistas, de limpiar esa imagen debería
preocuparse Sr. Obispo, de ser ecuánime, no parcial, repartir
equitativamente su conmiseración,
y si tiene tiempo para rezar, hágalo por los dos partidos que van a gobernar, ayúdeles para que se mantengan y administren con justicia, que auxilio necesitan; hágalo por el bien de toda España.
Indiscutíblemente, el hábito no hace al monje.
URDANETA:
Que ETA nació en un seminario,vale como génesis del origen de la banda terrorista y de que fuentes ha bebido.
Pero,¿y en el caso irlandés que señalan Guti y Julio Andradas?.¿Qué es lo que lleva a sacerdotes, amiembros de la Iglesia católica a amparar a asesinos?.¿Cómo pueden tener tal falta de sensibilidad,de empatía,de caridad cristiana para negar incluso una misa a las víctimas y sus familiares?.
Hay que tener cuidado con los lobos escondidos entre las ovejas, como es el caso.
Natalia, el terrorismo etarra sigue vigente por este tipo de declaraciones: declaraciones de los políticos, de los representantes de la iglesia, de los intelectuales, de los periodistas, de todos aquellos que generan opinión pública y que son comprensivos con la violencia etarra. La razón: es una violencia muy rentable, muy lucrativa. El resultado: 30 años de nacionalismo. Uriarte, con estas declaraciones, que Arzallus estará aplaudiendo con las orejas, saca su particular brillo a las metralletas etarra. Así ha sido en Euskadi toda la vida. Así nos ha ido en el País Vasco. Cuántos, mil muertos? Lo más triste es pensar cuántos deben caer aún... pobres asesinos, verdad, Sr Uriarte?, verdad D. Francisco?
Y antes de llamarse Uriarte se llamó Setién. Y en pequeños pueblos tiene otros nombres.
Y yo nunca entenderé cómo la iglesia sigue manteniendo a semejantes gusanos en su seno.
LAZARO;
Decir que Uriarte da cobijo en su palabras a los terroristas,es una falacia.
Condena el terrorismo sin paliativos.
Se limita,como cualquier cristiano de corazón, a pedir que no sean sus familiares los que tengan que pagar las consecuencias de los errores de los presos.
Dígame en donde dice algo semejante.
Si algo es criticable,es considerar a Batasuna como "adversarios políticos",cuando son simples encubridores y cómplices de los matarifes.
Pero de ahí a comparar a Uriarte con Setién, es como comparar a Nicolás Redondo con Pachi López.
SEMPIETNOS, a ese seudocura que se paseó por el Pais Vasco con la alegría y beneplácito del Gobierno, deberían haberle detenido por apología o asociación, o por indeseable; bastante tenemos aquí para que nos vengan de fuera.
Estoy de acuerdo con vosotros porque por principio básico no hay ningún católico, y mucho menos prelado o purpurado, que pueda anteponer sus ideas políticas, su forma de proceder a su religión,a los Mandamientos; aquéllos no son buenos cristianos.
Como Cristiano no miembro de la Iglesia Católica no alcanzo a comprender porque las autoridades de dicha iglesia no han inhabilitado desde hace mucho tiempo a todos estos proetarras.
No logro comprenderlo.
Se trata de un tema grave, que escandaliza a los católicos y a toda la sociedad, porque todos somos víctimas del terrorismo. ¿Dónde puedo encontrar las declaraciones completas?
Uriarte-Setién, Setién-Uriarte, tal para cual.
Es imposible entender como estos obispos forman aún parte de la Iglesia Católica sin haber sido expulsados de ella. Es posible que tengan miedo como le sucede a gran parte de la sociedad vasca, pero cuando uno tiene miedo, se queda callado y no hace declaraciones inoportunas y denigrantes. Coincido plenamente con Urdaneta al formularse la pregunta de cuántos padres de estos asesinos etarras se ha dirigido a las victimas de sus hijos para pedirles perdón en nombre de ellos o simplemente ofrecerles unas palabras de consuelo.
Un abrazo, Natalia.
Tienen un merecido "Prêmio 31 de Março". Una fecha de gran significación para los que luchan contra el comunismo en Brasil.
Abrazos
Estos ponen una vela a Dios y otra al Diablo.
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