lunes, junio 28, 2010

Voladura constitucional

Casi cuatro años después de admitir a trámite el recurso del PP al Estatuto de Cataluña, el Tribunal Constitucional ha emitido una sentencia donde se avala la mayor parte del texto, y que supone de facto, la voladura de la Constitución, de España como nación y pone en jaque para embates futuros, su unidad indisoluble.
Entre los artículos declarados inconstitucionales figura el 6.1 que consagraba el catalán como lengua «preferente» de las Administraciones Públicas. De nada servirá retirar el calificativo «preferente» si la sentencia permite mantener la Ley de Normalización que impide a los padres escolarizar a sus hijos en castellano.

De igual modo se mantienen los artículos que consagran la bilateralidad en las relaciones de Cataluña con el Estado. Ello significa que el Tribunal Constitucional ha dado el visto bueno en algunos capítulos a un texto más propio de un Estado confederal.

El bloque relativo al preámbulo, donde se reconoce a Cataluña como una nación, también ha sido aprobado, lo que supone dar carta blanca a futuras reclamaciones soberanistas y de autodeterminación ante organismos internacionales, tal y como ha sucedido con Kosovo.
El Gobierno mostró su satisfacción por el veredicto. Incluso el PP se congratuló del mismo en un patético intento por tender puentes de cara a posibles pactos con los nacionalistas catalanes.

Al final de "Rebelión en la granja", la dictadura de Napoleón y sus seguidores se consagra de modo absoluto cuando los animales preguntan al burro Benjamín (uno de los pocos que sabe leer) sobre cuál es el único mandamiento que queda escrito. Éste es el séptimo, convenientemente modificado por los cerdos:


-"Todos los animales son iguales, pero algunos son más iguales que otros".



31 comentarios:

supersalvajuan dijo...

Cuestión de tiempo era lo que era.

aspirante dijo...

Estos canallas han quitado el término preferente, dejando, en realidad el catalán como lengua única.
Ayer han liquidado España.
Prevaricación y traición.
Guillotina.

Interruptor dijo...

Y el PP ejerciendo de “ministerio de la oposición”, demostrando que hace tiempo que no son más que un apéndice del PSOE para que los españoles nos cremaos que esto es una democracia, sólo que ya no nos lo creemos.

Pero ¿no os habéis dado cuenta de que esto sale la víspera del partido de España en octavos del mundial? ¿Cómo era aquello…? Sí, “pan y circo”.

Eduardo de la Fuente dijo...

Hemos llegado a unos extremos en los que poco importa el contenido de la sentencia. El pancatalanismo va seguir haciendo lo que le dé la gana. Es imparable.

Un saludo

inisfree dijo...

El asunto del catalán es positivamente valorable. Si bien habrá que ver como se fuerza a la Generalidad a cumplirlo. Ya sabemos que, en otras ocasiones, simplemente, ha hecho caso omiso a decisiones judiciales.

La bilateralidad es una auténtica aberración. Sin más.

Mantener el preámbulo con el término Nación, parte del engendro supremo que es que la Constitución reconozca la existencia de "nacionalidades y regiones".

Natalia Pastor dijo...

Ayer se dinamitó la Constitución del 78, y la sentencia del Estatut marcará un antes y un después en la Historia de España.
De entrada se mantiene el término "nación" en lo referido a Cataluña, lo que suponde la voladura de la unidad nacional y la premisa básica de que la única nación es España.
A partir de ahí se abre la caja de Pandora de futuras reivindicacoiones ante la ONU,- como en el caso de Kosovo que señalas o Montenegro- y que supondrá una balcanización efectiva de nuestro pais dado que a Cataluña se unirán gallegos y vascos en un espiral a tumba abierta, en una carrera suicida.

Las ideas de JEUGENIO dijo...

Creo contigo, Natalia, que el TC ha dinamitado la Constitucion.
Se ha dado el visto bueno a una reforma de la misma mediante un atajo que es claramente una violación del espíritu y la letra constitucionales.
Si se quiere cambiar y/o modificar dicho texto él mismo define el procedimiento a seguir, cosa que evidentemente no se ha realizado.

Bucan dijo...

Desde que se redactó la Constitución actual, España entró en el camino de la Confederación. Cualquiera que se mueva entre diferentes autonomías y no esté en una sola casi permanentemente, se da cuenta perfectamente.
Una Confederación diseñada para acomodo del nacionalismo y del caciquismo, para facilitar el saqueo de los recuros públicos. Los tontos útiles de a pie que han apoyado por activa o por pasiva a los políticos que han impulsado éste disparate, que no se quejen de la ruina económica que se echa encima, por que es consecuencia directa de la burbuja política que la Confederación ha creado.

Sevilla Opina dijo...

No podemos olvidar que el estatuto catalán se ha aprobado con la colaboración de los jueces afines al PP por lo que este partido supuestamente ha negociado en las sombras y todo huele a acuerdo PSOE-PPOE.
No lo olvidemos

TRAS MIS ESCRITOS dijo...

Estoy de acuerdo con Natalia. Es más: la sentencia del Estatut cobrará verdadero sentido cuando se aplique su doctrina al caso vasco, que es donde está la verdadera madre del cordero.
Por cierto; tambien coincido con quien piense que es una cuestión imparable. Las cabezas, en España, hace tiempo que han cruzado el Rubicón. ¿cree alguien verdaderamente que al personal le importan estas cosas?. La población española tiene la capacidad de abstracción de un niño de 8 años. ¿creen Vds realmente que es posible meterles en la cabeza algo medianamente fundamentado?.
Esto está perdido

Maribeluca dijo...

pues que se reforme la Constitución ya y se corte el grifo a las autonosuyas, que parece que es lo único que entienden, sin pasta la gente es menos chula...y ¿para este café para todos, pero para algunos dos tazas, tanto tiempo desperdiciado...?

Bucan dijo...

El que un país sea centralizado, federal o confederal, es lo de menos. Todo tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Suiza y EEUU son los países federales más antiguos y no les ha ido del todo mal. La Constitución española es básicamente un proceso de confederación a la inversa. No son países que se confederan para unir algunos esfuerzos, como los Estados Confederados de EEUU antes de la guerra civil y la siguiente Federación. La Constitución crea regiones confederadas, pequeños estados que no existían, y con las Autonomías y sus Estatutos, los confedera.
Todo ésto no es bueno ni malo. El problema es que se hace en base a las exigencias nacionalistas. Y el nacionalismo lo ha contaminado todo. En Valencia puede ser menor que en Vasconia, pero hay pueblos como el de Biar catalogados como valencianos y un niño no puede estudiar en español salvo que sus padres puedan pagárselo en la enseñanza privada. Es una muestra de como se extiende el nacionalismo como una mancha de aceite.
En todas las regiones hay una búsqueda de "raíces" donde enclavar al individuo como si fuera un árbol del bosque. En Andalucia se ha elegido por bandera la blanca y verde que llevaba el Jerifalte moro en la batalla de las Navas de Tolosa cuando fueron derrotadas las huestes invasoras musulmanas.
Es una especie de locura colectiva.
El nacionalismo promueve el confederalismo desde el punto de vista de colectivizar al individuo y enfrentarle a otras colectividades. Las propuestas de independencia no se hacen en base a propuestas pragmáticas de eficacia, si es que la hubiera, si no en base al racismo y la desposesión de los derechos del individuo, que se trasladan a supuestos derechos de territorios o lenguas, en el caso de España, al no poder recurrir a diferenciaciones raciales o de religión, aunque existe el racismo de los apellidos como sustituto. Por eso es patético ver a Montilla de tonto útil del nacionalismo, porque por muchos méritos que haga, nunca podrá ser uno de ellos, de los nacionalistas catalanes de pata negra, tataranietos de aborigenes del lugar. El nacionalismo es un racismo y España está infestada.

E..P.. dijo...

La constitución,las leyes, los derechos, los deberes,los principios...se lo pasan por el forro de los pantalones según les convienen, esto es la mafiocrácia.
Siguen y seguiran mareando la perdiz, al final lo de siempre,
"El circo de los payasos",eso si;
viviendo del cuento a cuenta de nuestro bolsillos.
Saludos.

lujaban dijo...

Esto empieza a apuntar cada vez más al "Anarquía y libertad"
Yo me voy a hacer de la liga del rifle.
Por lo que pueda pasar.
Que pasará...
Salutem.

Urdanautorum dijo...

Los nacionalistas no cesarán hasta conseguir la total separación de España. Esto, mal que nos pese, tienen derecho a reivindicarlo, siempre que sea democráticamente.
Ese ideario los hace enemigos de España porque intentan destruir su unidad: pura lógica.
Lo que no entiende ningún animal racional es que la propia nación facilite armas y financiación a sus enemigos.
Es una vergüenza.
El Rey, garante del cumplimiento de la Constitución, ante estos exabruptos, acompañados de las corruptelas que salen a la luz de estos nacionalistas, y ante las arengas a la población para que se manifiesten contra un Tribunal, debería opinar.
¿Saldrá Montilla al balcón de la Generalitat para encabronar a las masas como hiciera en su tiempo otros honorables? Puede que no. Posiblemente estará preocupadoen cómo pagar el Colegio Alemán de sus hijos después de su reducción de sueldo, mientras todos los padres castellanoparlantes sufren la injusticia de que a los niños en sus primeros años de escolaridad
no les impartan las clases en su lengua e intenten que tampoco hablen en su idioma en el patio.
Los catalanes estamos hartos de estos insaciables y ridículos representantes nacionalistas, y hambrientos de sentido común y de justicia IGUAL para todos, con los ojos tapados, sin trampas ni sumisión al ejecutivo.
Están tratando al pueblo español como a idiotas. ¡En qué pais se puede ver a una vicepresidenta del Gobierno regañar a la presidenta del más alto tribunal de la nación!
De manicomio...

Josep Lluís dijo...

Acabo de descubrir el blog por casualidad y es excelente. Enhorabuena, Natalia.

Tu análisis sobre la sentencia del Tribunal Constitucional (he leído en foros que hay quien lo llama "Prostitucional") es muy acertado y estoy de acuerdo contigo. Nos aguardan cosas muy malas, en Cataluña y en el resto de España. Retomando el hilo de otro comentario tuyo, el del 26 de noviembre del pasado año, esto es cada vez más Yugoslavia. El proceso allí fue idéntico al que se está siguiendo aquí: lo del editorial conjunto que con mucho acierto apuntaste, la politización del deporte (Barça, Laporta, selecciones catalanas, rechazo a la Selección Española, etc.), la estratificación de la sociedad en ciudadanos de primera (nacionalistas, sean catalanes puros o no) y de segunda (charnegos, castellanohablantes y catalanes "espanyolistes")...

Todo se está desarrollando igual. Es cuestión de tiempo que termine de la misma manera.

Lo que falta por ver es si habrá guerra o no. Y limpiezas étnicas en lo físico, que en lo social y laboral ya han empezado hace años.

Un abrazo desde la región catalana, Natalia. Gracias por el blog.

velarde dijo...

Esto es lo que ocurre cuando te vas bajando los pantalones poco a poco, que al final te dan por el culo sin vaselina y, ojo sin rechistar eh?- que para eso somos progres.
Comienzo el desguace de lo que un dia se llamo España, con el contubernio y beneplacito de toda una clase politica cobarde, corrupta y vergonzosa!!!

Angélica dijo...

Creo que si muchos de los que votaron la constitucion hubieran leido el art.137, a lo mejor, habrian cambiado de opinion al respecto.

Y ahora igual hasta se dan coscorrones. Es un problema que se fraguó entonces, y es ahora cuando se observan las consecuencias.

Saluditos

Jorge dijo...

¿Esto quiere decir, que el TC de mayoría conservadora, con ponentes propuestos por el PP... ha buscado y conseguido cargarse la unidad de España?

Nodisparenalpianista dijo...

Siempre queda la esperanza de que, en un arrebato se sensatez, unos cuantos lleguen y se pongan a tarbajar en serio. Que terminen con los rastronjos de esa Constitución tan problemática (sin las chorradas de naciones y nacionalidades, disposiciones transitorias y memeces para cogérsela con papel de fumar igual no estaríamos así), que pudo ser buena para el 78 pero que tenía que haberse enviado al taller para revisión a los ocho años. Y con la experiencia, ponerse a elaborar una buena que deje bien cerrado los problemas que esta ha propiciado. Pero a ver quién es el guapo que separa los poderes, teniendo unos jueces-loro tan estupendos como los que tenemos. O un parlamento sumiso. O una financiación de partidos tan generosa. O tanto parlamentín y gobiernillo para ir colocando a todos los botarates.

Viva la ilusión, jolines.

Sempietnos dijo...

JCF:
No sea tan simplista en sus conclusiones.
Todo lo ocurrido es fruto de la partitocracia en un Tribunal Constitucional donde prevalece más la fuerza de la idea política que la razón jurídica.
Las sentencias interpretativas van a dar lugar a una inseguridad jurídica tremenda y una vez aprobado el Estatut, va a ser ley a ley y decreto a decreto donde vamos a ver con nitidez como la Constitución ha sido vaciada de contenido porque se ha dicho que una norma que la reinterpreta sustituye a un estado autonómico por uno federal.
Y ahora, todas las comunidades no van a querer un modelo inferior al de Cataluña, como es obvio.

Jorge dijo...

Sr. Sempietnos:

Coincido en la primera parte, el TC es básicamente político.

En la segunda parte no coincido, el estado autonómico nace desde el Estado unitario, es decir, fue el estado unitario el que cedió competencias, como también es obvio.

En el tercer punto también coincido, el estatuto catalán será el referente de los nuevos estatutos que se negocien.

Ya ve, vuelvo a ser simplista.

Sempietnos dijo...

JCF:
Treinta y cinco años después,uno de los graves fallos de la Transición son las autonomías.
La enrevesada organización territorial del estado. Para calmar el victimismo y las reivindicaciones de ciertos territorios autoidentitarios y lograr su integración en un proyecto nacional común, se apostó por un modelo descentralizador peculiar, que desgaja competencias esenciales del Estado distribuyéndolas en 17 autonomías taifales con gobiernos y parlamentos legislativos propios, incluyendo su enorme cohorte de burocracia añadida.
El principio unificador invocado que concibe el todo como la suma resultante de las partes es falso, y el nexo vertebrador cimentado en la cohesión y la solidaridad interterritorial, una vana ilusión.
El culmen del puro disparate son las autonomías uniprovinciales, con un organigrama de cargos principales e intermedios, visibles y ocultos, que imita la configuración estatal.

Tal diseño irracional parece derivar de la cultura del pacto y el consenso que caracterizó la etapa álgida de la Transición, así como de la necesidad acuciante de avanzar en el asentamiento de mecanismos y comportamientos democráticos, evitando revanchismos.

Lo que la terrible crisis económica y de valores que padecemos ha puesto dede manifiesto, es el fracaso absoluto de un sistema elefantiásico de administración territorial con multiplicidad de cargos y competencias, gangrenado de corrupción, y cuya pervivencia podría llevarnos al colapso.

Esto no se arregla con ajustes puntuales que castigan a sectores desfavorecidos o inocentes de la crisis; urge abordar una drástica reforma constitucional en favor de un Estado racional y descentralizado sólo hasta donde la lógica, el servicio y la eficacia lo permitan; reforma que debería evitar la bochornosa contaminación del partidismo político en instituciones judiciales.

Jorge dijo...

Sempietnos:

Los modelos descentralizados no deben de ser tan malos si analizamos un Atlas. Varios parlamentos en Gran Bretaña, división en Länder en Alemania, la confederación suiza, o los Estados Unidos son varios ejemplos de países pujantes en los que existe una concepción diferente del estado que la unitaria. Evidentemente esto no sucede en Mónaco, ni en Liechtenstein ni en Dinamarca, y simplemente no sucede porque no ha habido demanda o necesidad.

En España sí había demanda, por eso se descentralizó el estado, el problema fue que no se quiso dar protagonismo único a la gente que lo demandaba, así que para diluir el citado protagonismo se extendió el sistema hasta extremos casi surrealistas, en eso coincido con Ud. Es evidente que muchas autonomías se enteraron que eran autonómicas por el periódico y el mismo día.

Hay estudios que dicen demostrar que el sistema autonómico fue bueno para la economía en conjunto, yo en eso no me meto porque no sé. Es evidente que hay un exceso de administraciones, lo cual ya pasaba en el franquismo con la creación de las diputaciones, aberración administrativa especialmente dilapidadora y que responde a la recientísma división del país en provincias diseñada por los Borbones (parece ser que eso también fue hecho por los mismos motivos que el denominado "café para todos" esto es, ocultar la división histórica que mantenía el estado. Coincidirá conmigo que donde hay autonomías lo primero que sobra son las diputaciones.

Los estados descentralizados se conforman por la unión voluntaria en un proyecto común (estados federales y confederales) o con la descentralización de las competencias que decide el estado, como en el caso español. Es cierto que también existe el estado modelo jacobino, como puede ser el francés, el problema es que la gente que en España quiere un espacio propio de autogobierno (entre los que me incluyo) conocemos el resultado del modelo francés, y libremente decidimos que no nos apetece. Supongo que eso sí tenemos el derecho de decirlo, ¿no?

Sempietnos dijo...

JCF:
Evidentemente que existe el derecho a decidir.Lo que no está tan claro es el resultado que usted pronostica.
La gangrena gaseosa es tan peligrosa que si se quiere salvar la vida del paciente no hay más remedio que amputar los órganos afectados. O amputación o muerte.

Pues bien, ahí estamos, ahí está la España actual. Una España con gangrena gaseosa, producida por el Estado de las Autonomías. Y esto viene desde el error garrafal del "café para todos" del ahora ensalzado Presidente Suárez, porque desde entonces las Autonomías se han ido transformando en un cáncer para España. El desarrollo, con el despilfarro consiguiente, de las 17 Autonomías ha ido empobreciendo el Estado de tal manera que ahora ya no basta la medicina política para curar y detener la gangrena. Los tejidos sociales, económicos, empresariales, administrativos, judiciales están infectados y ya no hay solución.
O se amputa o se muere.

alberto daza dijo...

La España de las autonomías,Sempietnos, fue efectivamente un terrible error de diseño cometido por los políticos que hicieron la Transición, un error que generó una dinámica perversa entre las distintas autonomías, que luchan desde entonces por conseguir más dinero, por entrar en una deriva nazionalista (con z de nazi) y separatista, sometiendo a España a tensiones centrípetas irresistibles.

Fue un gravísimo error de la derecha española, entonces la fuerza dominante, acomplejada por su convivencia con el franquismo, que no supo resistirse a las presiones de los nacionalismos vascos y catalán, un error en el que también cayeron la izquierda socialista, obsesionada únicamente por la conquista del poder, y la monarquía, que pecó de cortoplacismo y no supo o no quiso ver que aquel Estado, diseñado para que funcionara en una proceso de descentralización permanente, ya encerraba la semilla de la discordia, la desigualdad y la ruina de la convivencia.

Hoy, treinta y tantos años despuésa, la España de las autonomías no sólo es un Estado en disgragación donde ni siquiera es posible mantener un idioma común, sino que, además, se ha convertido en un monstruo político, burocrático y clientelar, en el Estado más costoso de mantener de todo el Occidente desarrollado, con diecisiete gobiernos y parlamentos regionales que legislan sin necesidad, sólo para justificar su existencia, y cincuenta gobiernos provinciales (diputaciones), con una legión de politicos mediocres al frente, todos ellos, pugnando por rodearse de su propia corte fastuosa, dominada por el reparto de prebendas, privilegios y ventajas.

El Estado de las Autonomías se ha transformado en un Estado de Taifas donde los reyezuelos políticos imponen su ley y cada día destruyen más los principios y valores que hacen posible una nación: la igualdad, la libertad, la solidaridad, la justicia, la existencia de objetivos y metas comunes y el respeto mutuo.


Saludos cordiales.

Jorge dijo...

Soy JCF, igual ahora sale el nombre de Jorge porque modifiqué el perfil.

Lo de que no existe un idioma común en España casi suena a cachondeo. ¿Entiende ud. que en este debate hemos tenido problema para entendernos? Yo soy gallego, hablo gallego, y hasta donde me llega la humildad hablo y escribo el castellano con pocos problemas de construcción sintáctica y ortografía. Así que eso del idioma común que se pierde suena más a percepción distorsionada que a realidad, los únicos idiomas que se hallan en proceso de desaparición son otros, y no me haga mencionar estudios de la Comisión Europea y legislación internacional sobre derechos lingüísticos, en donde también se estima lo mismito que le comento.

Sempietnos dijo...

JORGE:
Explíquele eso a los padres que no pueden educar a sus hijos en castellano en Cataluña.
Según establece la recién aprobada Ley de Educación, la lengua vehicular de la enseñanza es el catalán, con exclusión manifiesta del español, que queda como una lengua marginal.
Hay cientos de escuelas en Cataluña donde se enseña en catalán y ni una sola en castellano, lo cual resulta bastante difícil de explicar teniendo en cuenta que la mitad de la población declara que el español es su idioma natal.

Nodisparenalpianista dijo...

Sempietnos, cientos de escuelas no, todas.
Exceptuando los colegios extranjeros. Por eso, cuando se dijo casid e cachndero, que si se quería educación en castellano, que el Instituto Cervantes montase un cole, en realidad, no hubiese sido tan mala alternativa. Así, es más sencillo porder educar a un crío en castellano en Tánger que en Cataluña.

Por otra parte, que esas pruebas escolares Cataluña quede última en casi todas las disciplinas tendrá algo que ver con las chorradas que pasan por aquí.

danicurri dijo...

luego nos extrañamos porqué hemos tenido tantas guerras intestinas en este putiferio llamado España, donde en lugar de remar todos a la vez nos dedicamos a fastidiarnos unos a otros; ojito con las crisis económicas que desde la noche de los tiempos han traído guerras...y el que avisa no es traidor

Stop dijo...

Desde Cataluña, puedo afirmar que aquí la administración, toda, expepto Hacienda, la Seguridad Social en su oficina de recaudación y tráfico, que es todo bilingüe, todo el resto es absolutamente en catalán. Lo mismo ocurre en la enseñanza.

Evidentemente el tema estaría en criticar a los nacionalistas catalanes, pero lo considero un error. No es porque no sean criticables, es que esto que pasa en Cataluña también pasa en otras regiones. Y en las que no pasa, van camino de que pase inventando o reinventando idiomas con tanto lustre como el aragonés, el andaluz, el murciano, el extremeño, en Canarias el guanche, que es puro delirio, en Asturias el bable, y puede que incluso Madrid acabe por tener una "lengua propia": el chulapo.

¿Quién tiene la culpa de esto?

¿La clase política? Evidentemente sí. Son culpables y grandes beneficiarios de esta idiotez identitaria casi fanática. Pero la pregunta es... ¿dónde están los supuestos intelectuales, los libre pensadores, los críticos, las voces de la clase pensante?

Y bueno, quizás en eso España sea diferente a otros países y la realidad es que carecemos casi por completo de una clase pensante. Aquí los supuestos intelectuales son gente de partido, del pesebre autonómico, o del pesebre del Estado, o simplemente pasan del asunto para no ser apedreados, vilipendiados, amenazados y tachados de fachas miserables.

En España la constante histórica es que mientras las clases dirigentes y los políticos han entregado el país a intereses extranjeros, o han preferido lo extranjero por sobre lo español, las clases humildes han tenido que dar la cara por España, defenderla y darles algunos hombres de renombre, que de lo contrario estaría España huérfana de todo, de escritores, de pensadores, científicos y artistas.

Poco o nada podemos esperar de esta oligarquía española que tan fácilmente se rinde ante la más mínima presión interna y externa, que es lo que han hecho siempre durante siglos, así que la solución, no sé cual será, pero si es que existe, no será fácil.

Ya lo decían en época del Cid: "que buen vasallo sería, si tuviera buen señor".