miércoles, octubre 28, 2009

Un país podrido


De norte a sur, de este a oeste, de una punta a otra del territorio nacional, no hay municipio, capital, provincia o comunidad autónoma que no esté salpicada, emponzoñada por el fango viscoso de la corrupción. España está podrida hasta el tuétano.

Gürtel, Palau, El Ejido, Costa del Sol, Mercasevilla, Ciempozuelos....un suma y sigue imparable que ayer llegó al oasis catalán- el reducto del 3% -, con nueve detenidos en Barcelona.
El alcalde de Santa Coloma de Gramenet, Bartomeu Muñoz (PSC), y dos ex altos cargos de Jordi Pujol, el ex consejero Macià Alavedra y el ex secretario general de Presidencia Lluís Prenafeta se han sumado a la lista de presuntos corruptos.
Entre los ciudadanos existe una profunda desconfianza hacia los políticos y los partidos, así como un descontento generalizado con el funcionamiento del sistema.
En el imaginario colectivo los políticos son una casta arrogante, deshonesta, poco capaz de hacer una buena gestión; aislados del pueblo
.



El dominio de la partitocracia en un país fragmentado en diecisiete reinos de taifas es extraordinario.

La partitocracia está podrida y no se podrá limpiar la corrupción en España si no se abre una causa general contra la clase política, como la que se inició en Italia con Tangentópolis.
Los políticos son una casta enquistada en el poder, con listas cerradas cuyos miembros no tienen que rendir cuentas más allá del propio partido o aun ante nadie, y que han sido tan desleales que han expropiado la empresa que les emplea (el Estado) a sus legítimos propietarios (los ciudadanos), a los que no sólo han robado sino que también esquilman.
Un español tiene una pensión máxima de 32.000 euros anuales, pero los políticos tienen derecho a pensiones vitalicias muy superiores. 74.000 euros en el caso de ministros, secretarios y subsecretarios.


Además estas pensiones no son incompatibles con otros sueldos de la Administración u otras actividades económicas. Un diputado o senador tiene que estar sólo siete años en el cargo para optar a la pensión máxima (32.000 euros), mientras que un trabajador autónomo o por cuenta ajena necesita 35 años cotizados. La retención de las nóminas de diputados y senadores es sólo del 4,5% y de nuestros bolsillos pagamos incluso las multas de tráfico que la DGT les impone.
Sí, han leído bien. Hasta las multas.
Zapatero es el único presidente de la UE que carga sus gastos vacacionales a los presupuestos estatales. Los diputados pueden utilizar a su antojo, con cargo a las arcas del Estado, aviones, trenes o barcos. Disponen de 5.000.000 de euros al año para viajes.
Bono, por ejemplo, entre sueldo y complementos, cobra 13.856 euros al mes: 3.126 como diputado, 3.605 como complemento, 3.915 para gastos de representación y 3.210 de libre disposición. Las dos últimas partidas suman más de 6.000 euros mensuales para comidas, regalos y actos de protocolo. Todo este dinero sin contar las indemnizaciones previstas por ley para sufragar «gastos que sean indispensables para el ejercicio de su función».



Mientras, 5.000.000 de españoles engrosan las listas del INEM, 750.000 personas comen diariamente en Cáritas, y los robos de comida en supermercados han aumentado un 40% .
Si la sociedad civil, el ciudadano de a pie (o de a rodillas) acepta o asume como normal y no se rebela ante este abuso, este saqueo, esta degeneración moral; si permanece pasivo ante el derrumbe de los principios que deberían conformar una auténtica democracia, los cimientos de este país se diluirán indefectible y finalmente, y acabaremos abocados a una lenta agonía de las instituciones, de los partidos y el sistema; una lenta agonía de nosotros mismos.


natpastor@gmail.com

32 comentarios:

Anónimo dijo...

Es evidente la degeneración y el derrumbamiento de un sistema que sólamente podía generar corrupción, abuso de poder, ataques a la familia y demás cosas que estamos contemplando. Quien más quien menos supongo que piensa que hace falta una auténtica reforma, pero para ello hace falta una ciudadanía fuerte, consciente de sus derechos y que ame a su país. Por lo pronto, veo que con todo esto, los revolucionarios de izquierda se están frotando las manos, supongo que analizan la situación como propicia para sus intenciones, de hecho son los primeros en desprestigiar nuestro sistema, mezclando los público con lo partidista, etc... Es el peligro al que estamos expuestos. Nuestro estado de derecho se muere, porque nadie lo defiende. ¿A quien beneficia eso?

francisco dijo...

Magnífico post,Natalia.
Y es absolutamente cierto:España está podrida hasta el tuétano.
La corrupción forma, desgraciadamente, parte de la propia clase política;partitocracia, listas cerradas y bloqueadas,diecisiete autonomías,diecisiete reino de taifas, un poder judicial controlado por los partidos políticos,...
Estamos abocados a una Tangentópolis como en Italia, o ésto saltará por los aires.

aaaaaaaaaaaaaaa dijo...

Las instituciones del Estado han dejado de ejercer su función de garantes del derecho, y se han prostituido a favor de una casta política mísera y enfangada.

Un ciudadano, por ejemplo, de Madrid sustenta con sus impuestos el salario de 27 concejales, 120 parlamentarios de la Asamblea madrileña, 264 senadores, 350 diputados nacionales y 54 del Parlamento Europeo. En total, 815 cargos electos con un sueldo base que supera los 3.000 euros. Y sin contar los puestos de confianza que arrastra cada uno.

Los ex ministros mantienen durante dos años una pensión por cese de 58.000 euros anuales, cifra seis veces superior a la pensión media española. En la actualidad, cuatro ex ministros compatibilizan ese dinero con el sueldo de diputado: José Antonio Alonso, Fernández Bermejo, María Antonia Trujillo y Jesús Caldera.

Este país está podrido,Natalia; absolutamente corrompido de la cabeza a los pies.
Lo que sale es la punta del iceberg.

Eduardo de la Fuente dijo...

Fantástico post, Natalia. Suscribo el comentario de Risquett, la élite de la partitocracia crece y crece mientras la seguimos engordando con nuestros impuestos.

Siempre se critica al Canovismo al considerar que la casta política se divorció del pueblño, que vivían en mundos diferentes... Hoy no nos quedamos cortos. Mientras nosotros moramos en el inframundo ellos disfrutan de las mieles del Edén.

Un saludo

Gerión dijo...

Primero ante todo, la causa principal es la “JUSTICIA”. Aquí, en esta tierra
de Dios no hay justicia. Los jueces, las fiscalías, etc.… Están para favorecer
al político de turno. Mientra que la justicia la maneje los partidos, no hay
nada que hacer. Una vez que se libere, empezaremos a ver la luz.
De todas formas, condenan a los políticos y después lo readmiten en los
partidos por la puerta de atrás ó de alante. Véase caso “FILESA”.

Alijodos dijo...

Joder natalia vaya post que nos has endiñado con datos que nos dan que pensar que en este pasi no hay mas que chorizos..Pero ademas de los gordos gordos...Con lo guay que seria españa sin esta gentuza...Sobretodo andalucia...un abrazo amiga...

Isaak dijo...

Total, absoluta y radicalmente de acuerdo con esta entrada, Natalia. El germen se planta en los municipios. En todos, y por todos los partidos. Diría que PP, PSOE e IU se van a la zaga unos a otros en cuanto a delitos de todo orden y gravedad en los ayuntamientos. Nada que echarse en cara unos a otros.

Miles de inútiles van saltando de las alcaldías o concejalías a los parlamentos autonómicos, las Cortes o el Senado, como mecanismo normal de quitarles de enmedio y que sigan comiendo, y comiendo bien.

Los PGE alimentan gratuitamente demasiadas bocas sucias. Y la gente come y calla, igualmente, porque cada cual medra como puede, y el pueblo llano no es inocente.

Saludos cordiales.

Alejandro dijo...

Creo que son muy pocos los políticos corruptos. Lo malo es que hacen mucho ruido, y dan muy mala reputación al resto.

eligelavida dijo...

No sé si es algo propio de la clase política de este país, pero es para deprimirse. No sólo tienen privilegios en exceso (algunos no se comprenden), sino que además abusan de su posición, en lugar de servir. Y luego pretenden que el electorado vaya a votar…

alberto daza dijo...

Suscribo tu magnífico,extraordinario post,Natalia de principio a fin, por que el diagnóstico y análisis de la terrible enfermedad que padece España, esta reflejada ahí con una claridad meridiana y cristalina.
No se trata de “políticos corruptos” -sean éstos muchos o pocos- sino auténticas tramas de corrupción, indisolublemente unidas al poder de la partitocracia, cuyo único sentido es el robo sistemático.

En cada uno de los casos, el mecanismo de saqueo de las arcas públicas está anudado con el poder antidemocrático de la partitocracia,de una casta política endogámica absolutamente degenerada, que incluso en momentos de crisis donde las consecuencias de la recesión sacuden dolorosamente al país,no sólo despilfarren el dinero público en gastos suntuarios, sino que se dediquen de forma organizada a robarlo a través de tramas corruptas.

O esta sociedad civil reacciona ya y de manera contundente, se acaba con el poder omnímodo de las cúpulas de los partidos, o nos veremos abocados a uan explosión del sistema de incalculables consecuencias.

Saludos cordiales.

Julio Andradas dijo...

Aquí en España, Natalia, se ha instalado la partitocracia y con ella la corrupción que anida en las instituciones oficiales y en ellas tiene su caldo de cultivo.
La corrupción se ha incrustado en el modo de hacer política, impregna la financiación de los partidos políticos y de los sindicatos.
La democracia no pude pervivir bajo la sombra infame de la cleptocracia.

Sempietnos dijo...

La democracia ya no existe.
Lo que nos rodea y gobierna es una vulgar partitocracia que en nada se parece a la democracia original que con ilusión nació en 1978.
A los políticos sólo les interesa permanecer en el poder.
La partitocracia es una pandemia crónica en España que tiene infectadas y podridas todas las instituciones hasta la raíz.

La Administración del Estado cuenta con 409 altos cargos y más de 6.100 empleados que no son funcionarios ni personal laboral, categoría donde se ubican la mayoría de puestos de libre designacion. Casi el 3% de sus empleados.
En las Autonomía, en ese cáncer que desnagra al país,el porcentaje alcanza el 23%.

Y gran culpa de esta situación la tienen los los medios de comunicación. Primero los públicos, manipulados y utilizados como herramientas de poder. Pero también la gran mayoría del resto, atrapados en los intereses espúreos que les llevan a tratar de "proteger" este sistema.

El otro día oía a Javier Carballo,periodista de EL MUNDO Andalucia y tertuliano de Onda Cero con Carlos Herrera, decir que la "corrupción es sólo transversal".
No,señor Caraballo,no.
La corrupción no es transversal:la corrupción afecta a todas y cada uan de las instituciones del Estado, empezando por la Justicia, pasando por Ayuntamientos,Diputaciones,Comunidades Autónomas y terminado en el Gobierno.
¿O acaso el "caso Faisán" no es otro modo de corrupción? .
Hay que eliminar de manera fulminante a estas castas parasitarias para regenerar el sitema y salvar la democracia.

Anónimo dijo...

Sí, a Italia hace tiempo que la dejamos muy atrás en corruptelas. Y aún no se ha dado suficiente publicidad a las chorizada a lo grande de el PNV durante los últimos 30 años.
Muy superiores a todo los Gurtel, Marbellas y Pujoles. Y tan organizada que aún sigue funcionando desde los ayuntamientos y diputaciones.

Creo que queda una única solución. Difundir en los blogs que en las próximas elecciones de lo que sean, y en las siguientes, NO SE VAYA A VOTAR.
Los demás remedios no sirven porque aquí el gentío no se mueve más que en caso de que a su equipo de futbol le metan un penalti injusto.

Natalia Pastor dijo...

ISAAK Y EDUARDO DE LA FUENTE:

Sin duda estamos viviendo la misma situación que se vivió hace años en Italia y que en el post enlazo con la "Tangentópolis".
En las partitocracias, las oligarquías o cúpulas partidistas monopolizan la representación política gracias a las candidaturas cerradas .
Al mismo tiempo, producen la fusión de poderes mediante el control del ejecutivo desde el Gobierno, del legislativo desde la mayoría, y del judicial a través del nombramiento de magistrados.

Desgraciadamente,el modelo italiano se copió y trasladó a España, que en 1978 recibió una forma radical de partitocracia, complicada por los autonomismos.
La partitocracia instaurada en 1978 no sólo se ha mantenido con su sistema de listas cerradas y bloqueadas, y la disciplina de voto en ayuntamientos, autonomías y Cortes, sino que, mediante leyes orgánicas, ha sometido al poder judicial, que ha pasado a depender de las oligarquías partidistas. Todo intento de crear movimientos de independientes fue ahogado por el bipartidismo PSOE/PP.

Este monopolio de la representatividad es sinónimo de totalitarismo encubierto y el germen de la corrupción que ha podrido todas las instituciones.

El Subdirector del Banco Arús dijo...

En el clavo. Son todos unos ladrones. Son como los champiñones, alimentan de la podredumbre del sistema.

Y la solución, cada día, es más complicada; dentro de los márgenes que el sistema propicia, la solución es imposible e impensable.

Caballero ZP dijo...

Aun siendo de una gravedad extrema el grado de podredumbre y corrupción, lo que más me indigna es el grado de corrupción y servilismo de los medios de comunicación.
Saludos

carabaña dijo...

La clase política en España está corrupta en su totalidad.
Esto no tiene nada que ver con ideologías, o con si son nacionalistas, de izquierdas o de derechas.
El sistema está absolutamente podrido.

jerusa dijo...

En las próximas elecciones les va a votar su padre. Esto no es democracia,esto es una gigantesa estafa, lleno de juego sucio y corruptos por ambos lados.
Que asco y que pena de pais.

luján dijo...

Hay que desterrar de una vez el bipartidismo, que es el auténtico mal de esta partitocracia.
Busquemos las raices del mal:¿Qué educación recibe la sociedad, ¿cuáles son los valores que imperan?.
Lo único que puede llevar a una regeneración completa de la política es un total absentismo en las elecciones o el voto en blanco.

Saludos.

Miguel A. Pazos Fernández dijo...

La corrupción empieza en el mismo momento que empieza la democracia; cuando no se establece un límite del poder claro, y una separación efectiva.

Saludos.

María dijo...

Excelente post, Natalia.
El asco y hastío hacia los políticos y sistema en general, de muchas personas con las que me relaciono, va en aumento cada día, pero estoy de acuerdo con Isaac cuando dice que el pueblo no es inocente.Es como un círculo vicioso del que no sabemos o no queremos salir. Estamos en manos de unos delincuentes, mayoritariamente, y mientras les apoyen con los votos los que tienen algo que rascar, seguirán ahí.
Yo tampoco iré a votar mientras siga todo igual, es más, no creo en las instituciones tal y como funcionan actualmente.
No tengo adjetivos para describir la actitud de los sindicalistas liberados o con montones de horas libres, cobrando sus sueldazos como si no pasara nada. Qué asco!!.
Siento pena y vergüenza de ver en lo que nos hemos convertido en este país.
Un saludo cordial a todos.

Anónimo dijo...

España esta podrida y necesita una revolucion politica y economica que la salve, y no solo eso, ya que aparte de la podredumbre politica y economica esta la moral.

Nodisparenalpianista dijo...

¿Sabéis que por aquí, donde Montilla, la gente dice "hala, qué cosas pasan"?

Están anestesiados, aún no se han enterado. Aunque parezca emntira.

supersalvajuan dijo...

Esa cifra de Cáritas es bestial. Para ponerse a llorar.

Bucan dijo...

En realidad, es peor que una Partitocracia. Es directamente una Corruptocracia, donde los partidos se han puesto de acuerdo para que no exista independencia efectiva del Poder Judicial. Y la supuesta descentralización de las Autonomías, ha dado lugar a que resurja el viejo caciquismo hispánico. Generalmente, los casos de corrupción que salen a la luz son aquellos que o bien en la calle ya lo sabe hasta el Tato o que obedecen a venganzas políticas. Y hay que pensar que la mitad del sistema financiero, las Cajas, están bajo el control de poderes políticos regionales. La de dieu.

germán dijo...

España es un estercolero, Natalia.
En España la corrupción no es cíclica, es cultural y sistemática. No hay nada más que ver y comprender para qué y para quienes se ha montado el Sistema actual, porque los sucesos que ocurren constantemente dan la razón para afirmar que esto es una partitocracia absolutamente putrefacta.

Saludos.

José F dijo...

Natalia,

El Estado es sinónimo de corrupción y, en el caso español, hay 17 gobiernos autonómicos imitando pequeños Estados federados.
La regla de tres es simple. A pesar de ello todavía nos extraña la corrupción tan descomunal.

Un saludo

Urdanautorum dijo...

Además, las arcas del estado temblando.
La situación es muy grave. Está a niveles de la época de decadencia de Felipe González, y la oposición grogui.
Al ex-honorable Pujol, -español del año-, le preocupa enormemente que los mozos de escuadra "hablen castellano entre ellos" (según sus memorias), pero no que roben sus lugartenientes o malgasten el dinero en embajadas u otros gastos
fatuos de representación.
Al final Aznar tenía razó al decir que la sociedad catalana está enferma. Un mierda de este calibre no puede pasar desapercibida por el gobierno, la prensa, la justicia, sus propios partidos, burguesía influyente, sindicatos o la policia.
Mientras robaban, la preocupación de estos imputados era que se hablara catalán en los patios de infancia o en sustituir el nombre de Navidad o Semana Santa por primavera o invierno, entre otras lindezas.
España huele a podrido Natalia.

Bucan dijo...

He leído el mensaje que me dejaste en el blog donde mencionas a Joan Riao, tachándole de tarado. En principio es una palabra fea, porque para empezar, ese tipo de gente, de tarados tienen poco, son unos vivales que viven a tuttiplen a costa de los "tarados" de verdad, de los chalados que les siguen, les jalean y les votan. En realidad, es el prototipo del "charnego", por usar el lenguage nacionata, que ha encontrado un nicho de subsistencia en la tierra de acogida (sus padres son de Andalucía y de Castilla que emigraron a Cataluña) apuntándose al disparate nacionalista. Tiene que existir desde luego, una cierta anomalía psíquica. Lo del charnego que quiere hacer méritos catalanistas o el maketo que quiere hacer méritos ante el nacionalismo vasco, es de risa. Son los tontos útiles por excelencia. Podrán ocupar altos cargos, ser palmeados en la espalda, pero ellos, pobles hombres en el fondo, no se dan cuenta de que nunca serán "catalanes", nunca serán "vascos", en el sentido que el nacionalista catalán o vasco de pata negra lo entiende. Yo conozco el fenómeno vasco, siendo vasco de generaciones, y cuando estás en alguna tertulia donde todos son "vascos", cuentan como aquél de allí tiene un bisabuelo de Cáceres, o un tatarabuelo de Valencia,.. Es decir, esa información, en los "círculos genéticamente puros", se transmite, y nunca serán realmente de los suyos, por muchos méritos que hagan. Y los que ya son de traca son los mestizos: un progenitor vasco y otro no vasco. Como les dé por el nacionalismo, es que matarían a su padre o madre no vasca. No saben que es inútil. Nunca serán vascos-vascos. Lo jodido es que haya vascos-vascos que tengamos que aguantar a toda ésta basura nacionalista, y para más inri, a los arribistas y mestizos dando lecciones de vasquismo. Este país, HISPANISTAN, está lleno de chiflados.

lujaban dijo...

Muy breve:
¿Qué hacemos?
Salutem.

BOIRA_A dijo...

Ciertamente como dices por los cuatro puntos cardinales estamos gobernados por corruptos y una forma de atenuar esta amplia corrupcion es listas abiertas ademas de que TODOS y cada uno de los altos cargos deberian hacer una declaracion jurada de sus bienes, los de su esposa, hijos y nietos, seria una forma de que no pudieram ponerlo en las cuentas de estos familiares mas directos y logicamente unos jueces mas imparciales

Lázaro dijo...

Yo tengo la sensación de que siempre, en la dilatada historia de este triste país, las cosas han venido siendo como son ahora. Y aquí seguimos, tan panchos. Haciendo chistes y presumiendo de que como en España, en ningún sitio. Hablas de rebelión de la sociedad civil. Te apuesto lo que quieras a que no será de la española y a que dentro de un año, día arriba, día abajo, seguiremos despotricando de lo mismo. Besos resignados.