Echando un vistazo a la situación del Reino Unido antes de 1979, antes de la victoria electoral de Margaret Thatcher, el panorama sindical no era muy distinto del que tenemos hoy día en España. Durante el mandato de la Dama de Hierro, el primer problema grave fue el relacionado con la huelga salvaje de mineros a partir de marzo de 1984.
Ya habían convocado tres huelgas generales, los enfrentamientos con la policía se cobraron decenas de heridos, la violencia indiscriminada se adueñaba de las calles hasta que Thatcher dijo basta, les plantó cara sin ceder un milímetro al chantaje y le infringió al movimiento sindical británico una derrota de la que todavía no se ha recuperado.
Desde hace dos días Madrid es un caos total. Dos millones de ciudadanos resultaron directamente afectados por una huelga salvaje del Metro, que provocó decenas de kilómetros de colas en las carreteras de acceso y un colapso absoluto en el centro de la capital de España.
Los sindicatos colocaron piquetes en las cocheras en el turno de mañana y de tarde, impidiendo la entrada a quienes no querían parar.
La causa del conflicto reside en que los 7.000 trabajadores del Metro se niegan a aceptar el recorte salarial que quiere imponer el Gobierno de Esperanza Aguirre, en cumplimiento del decreto ley de ajuste presupuestario, aprobado en el Congreso y que afecta a todo el sector público. La dirección de la empresa les ha ofrecido fórmulas para minimizar el recorte, pero los negociadores sindicales no sólo se han mostrado inflexibles sino que han hecho diversos alardes de fuerza. «Vamos a reventar Madrid», dijo Vicente Rodríguez, presidente del comité de empresa del Metro y jefe del sindicato de conductores, palabras que podrían suponer un delito de inducción al abandono del servicio.
La causa del conflicto reside en que los 7.000 trabajadores del Metro se niegan a aceptar el recorte salarial que quiere imponer el Gobierno de Esperanza Aguirre, en cumplimiento del decreto ley de ajuste presupuestario, aprobado en el Congreso y que afecta a todo el sector público. La dirección de la empresa les ha ofrecido fórmulas para minimizar el recorte, pero los negociadores sindicales no sólo se han mostrado inflexibles sino que han hecho diversos alardes de fuerza. «Vamos a reventar Madrid», dijo Vicente Rodríguez, presidente del comité de empresa del Metro y jefe del sindicato de conductores, palabras que podrían suponer un delito de inducción al abandono del servicio.
Por si fuera poco, de manera obscenamente vergonzosa y que retrata el pelaje de los sujetos, Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo apoyaron a los huelguistas y justificaron este paro salvaje con el argumento de que los servicios mínimos dictados por el Ministerio de Trabajo eran «abusivos». Los dos dirigentes sindicales advirtieron que actuarán de la misma forma el próximo 29 de septiembre si la Administración dicta unos servicios que ellos consideren excesivos.
Esperanza Aguirre ha calificado, con razón, de «chantaje» esta actitud, subrayando que es intolerable que unos pocos puedan paralizar un área urbana con seis millones de habitantes y provocar graves daños económicos.
La guinda la pone el Gobierno de Zapatero - contra el que no se manifiestan los sindicatos - negando la colaboración de las fuerzas policiales y de Seguridad del Estado para evitar que se repita la coacción de los piquetes.
El Gobierno autonómico madrileño puso ayer en conocimiento de la Fiscalía la coacción de los piquetes y el incumplimiento de los servicios mínimos.
Lo sucedido encaja en lo tipificado en en el artículo 315 del Código Penal (coacciones), castigados con hasta cuatro años de cárcel, y de abandono del servicio público, tipificado en el artículo 409 y castigados con multa de un año.
La ley debe caer como un mazo implacable sobre los promotores de esta huelga ilegal,salvaje, política, vandálica y sectaria.
Los ciudadanos de Madrid no pueden ser rehenes de esta caterva.
22 comentarios:
Espero que a Esperanza Aguirre no le tiemble el pulso y despida a los trabajadores que debiendo trabajar para cumplir con los servicios mínimos no lo han hecho.
"Si tenemos que entrar a matar entraremos a matar"
Estos son los sindicalistas y liberados que padecemso y mantenemos en nuestro país con nuestros impuestos,Natalia.
Esta huelga salvaje esta orquestada para acosar a Esperanza Aguirre y es aplaudida de manera sibilina desde el Gobierno.
Una muestra más del gangsterismo sindical de la izquierda.
Hay una diferencia a mi modo de ver: los sindicatos aquí, son prolongación de los partidos políticos socialista y comunista. Y aunque en Inglaterra pudieran tener sus conexiones con el laborismo, ni ver con las que existen aquí entre sindicatos y partidos de izquierda o nacionalistas. Y ni que ver tiene el laborismo inglés con los socialistas y comunistas de aquí.
Y en cuanto a aplicación de la Ley, en todas las huelgas salvajes que ha habido (recuerdo una en que se pararon todos los trenes en España), al final, una vez finalizadas, los responsables se van de rositas, y hasta la próxima, como ésta.
Es ruinoso, pero no importa, se emite más deuda. Y los que pueden, a trincar, a trincar, y langosta para cenar. Hasta que reviente, pero que les echen un galgo.
Que descaro, se la hacen a Esperanza pero no se atreven con el causante Rodriguez, los que deberianhacer los afiliados es dejarlos solos a estoa pandilal de vagos y maleantes
Como mazo implacable..., la Ley..., sobre los Sindicalistas...
Natalia, hija, no lo verán nuestros ojos.
Ni eso ni al Ejército conduciendo vagones del Metro si fuere necesario.
Que ésto es España, no lo olvides. Aquí hay cosas que no pasan...
Oyendo a los tales sindicalistas y viendo las imágenes en el telediario, asocié la idea de que se trataban de mineros bolivianos. Quizás es que ese lenguaje sea más propia de la caterva bolivariana y no de la España del siglo XXI.
esto es propio de otro siglo, hace falta de una vez una Ley de Huelga que impida que seamos rehenes de esta banda de salvajes doctrinarios...a Esperanza se la entiende todo, lo que ya es un lujo entre los políticos, esperamos que no se arredre, o más bien "la arredren" y coarten los ñoños centroideos y arriolescos del partido
Despedir a los trabajadores que no han "podido" cumplir los servicios mínimos... !!NO!!... porque ha sido por culpa de los salvajes "piquetes informativos". A quien hay que despedir es a los imbéciles trabajadores que secundaron la huelga, que hunden España haciendo huelga mientras se toman unos dias libres en las pisinas. A esos les debe sobrar el dinero (si es que les descuentan los días no trabajados).
La mayor desvergüenza es que el origen de la rebaja está en ZP, pero a por él no van.
Los sindicatos defendiendo a trabajadores súper privilegiados, por seguridad en su puesto, sueldo y condiciones laborales, y condenando al resto a pasar múltiples padecimientos y penurias!
Para bien o para mal, esto no es el Reino Unido. Allí nadie acompleja si un gobierno no da su brazo a torcer contra un lobby sindical, o por ejemplo si la policía abre fuego contra un comando del IRA. Se saben demócratas para lo bueno y lo malo.
Un saludo.
Cabe destacar que la rebaja de sueldo será entorno a los 15 euros mensuales en unas nominas bastante altas, así como que esta huelga la protagonizan los mismo que cometieron sabotajes contra el Metro de Madrid y que ya fueron investigados por la policía, sabotajes que se vuelven a producir.
Por ultimo me gustaría dejar una pregunta para esta panda de sectarios, y los imbéciles que les siguen, ¿no os habéis dado cuenta que muchos debéis el puesto de trabajo a la excelente gestión de Esperanza Aguirre y los muchos kilómetros de metro que ha construido?, kilómetros de los que no se construyó ninguno cuando gobernaban ellos.
Saludos
ZP es el principal culpable de este
teatro sindical al cual solo va ha beneficiar a los más previligiados y los perjudicados serán el clásico
trabajador eventual o temporal.
Los sindicatos están viendo como su afiliados se dan de baja y se están quedando pelaos con el cheque
regalo del Estado que en fin de cuenta es de nuestros bolsillos, haber si no. Habrá despidos y perdidas de millones de euros y el mayo perjudicado es el ciudadano, pero esto pasa con cualquier huelga.
Las huelgas se hacen y perjudican, se hacen para exigir mejoras y derechos y como siempre los perjudicados son los ciudadanos.
Los sindicatos solo procuran no perder sus puestos ya que la cosa no pinta muy bien para ellos.
Eso si ellos con o sin huelgas a primero de mes su sueldos por tocarse todo el los bajos de los pantalones.
Saludos.
Lo cierto es que nuestros sindicatos, y especialmente sus liberados, se han convertido en un cáncer.
La sociedad española no puede tolerar esta toma de rehenes por parte de una minoría radical, financiada con dinero público, que actúa como una auténtica mafia en defensa única de sus propios intereses.
Saludos cordiales.
Ojalá hubiera en la derecha española gente con tantos "ovarios/huevos", que no se acobarden a decir las cosas por su nombre. Ojalá hubiera más políticos en España como Esperanza Aguirre.
AMAYA:
Es imprecindible poner freno a este chantaje contínuo de la mafia sindical y ahí está el ejemplo de Thatcher.
Esperanza Aguirre debe hacer lo mismo.
FRANCISCO:
Es evidente que es una huelga política, amén de salvaje,sectaria y que tiene como rehenes a más de dos millones de ciuddanos.
Los sindicatos actúan como "guardia de corps", como ariete mamporrero de un Gobierno que alienta la huelga para desgastar a Aguirre pensando que los ciudadanos son tontos de baba y no se percatan de los ardides tabernarios y bajunos de esta caterva.
BOIRA:
Los sindicatos no tienen ninguna credibilidad,ningún respaldo social salvo el de ese ejército de "liberados", ese magma de parásitos que abrevan en el pesebre de las subvenciones con las que compra voluntades y llena estómagos J.L. Rodríguez Zapatero.
INISFREE:
Esperemos que Aguirre aguante el embate y parta el esponazo de esta mafia.
Ya es hora de poner punto y final a este chantaje mafioso contínuo.
Despedidos y aplicación implacable de la ley.
CLAUDEDEU:
Cada día que pasa estamos más cerca de las hordas bolivarianas, de los "camisas rojas".
Avanzamos despacio pero sin pausa hacia ese paisaje con el que sueña Zapatero.
Tengo la impresión de que Esperanza Aguirre (esperanza de España), tiene agallas para mantener una postura estoica, pero, a diferencia de la Sra. Tacher, la policía no depende de ella y de la fiscalía mejor no hablar.
Estoy de acuerdo que el asunto es grave porque se está delinquiendo con la pasividad del gobierno y que debe mantenerse firme para que se entere Europa de este desmadre, aunque dudo del apoyo de su partido.
Saludos
Es que no es lo mismo hacerle una huelga a Zp que a Esperanza. Esta les "pone" y les motiva más. Por eso la huelga de los funcionarios fue un sonoro fracaso, no tenían excesivo interés en quitarle todo el cariño de golpe.
Un saludo.
Golda Meir, Margaret Thatcher, Esperanza Aguirre...
Mujeres.
¡Ni más ni menos...!
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