sábado, octubre 30, 2010

Tanta paz lleve...


Llueve sobre Madrid y en la Puerta de Alcalá una multitud despide a Marcelino Camacho sindicalista, comunista, y apologeta de una ideología que ha dejado a lo largo del siglo XX más de cien millones de muertos.
Dicen que con él llegó el "sindicalismo moderno", aunque en los discursos de los presentes se rememora y reclama la "lucha de clases" y todo tiene un tufo a rancio, a caspa, a impostura, a sectarismo.



Hablan de Camacho como un "luchador por las libertades" cuando comunismo y libertad son conceptos incompatibles, antagonistas. Comunismo es exactamente lo contrario de libertad.
Se ha ido Marcelino pero la amenaza de lo que su ideología representa, sigue presente entre nosotros.


natpastor@gmail.com

18 comentarios:

candela dijo...

...Como dejó.

Aunque el hombre haya muerto, hay que decirlo.

Absurdos aparte, dice el refrán que Dios nos libre del día de las alabanzas.

J. F. Sebastian dijo...

Y con él se ha ido su coherencia de su manera de pensar y de vivir. Se quedan los liberados, los cruceros, las comidas estrella michelín y por supuesto, sus piquetes "convencitivos".

J. F. Sebastian dijo...

*/

aspirante dijo...

Ha muerto un apologeta del crimen y la dictadura.
Así de simple.

Bucan dijo...

Efectivamente, de luchar por libertades nada, porque estar contra Franco y a favor del comunismo no era luchar por ninguna libertad.

Son fanáticos que no se dan cuenta de que las injusticias existentes en éste mundo, con el comunismo, sólo hacen que empeorar. Veáse la URSS y tantos otros países.

Adán Moreno dijo...

Buenos días querida amiga Natalia, FELICIDADES, no se puede decir mejor y en tan pocas palabras, así pienso yo también, un abrazo. Saludos para todos los seguidores de este blog.

Natalia Pastor dijo...

Candela:

En este país cuando alguien fallece la loa es automática: nadie parece pararse a reflexionar a cerca de lo que defendía, de cuales eran sus ideas.
Y por terribles que éstas fuesen, se aplaude al interfecto.


JF Sebatián:

La "herencia" del sindicalismo de Camacho son una pléyade de mamporreros adocenados, una caterva de pesebreros y mariachis de un Gobierno que ha destruido todos los derechos sociales con la mayor impunidad y el silencio cómplice de ese "sindicalismo moderno".

ansiadalibertad dijo...

Lo preocupante no es lo que se dice cuando alguien muere. Entonces puede ser comprensible 'buscar virtudes' en la vida del fallecido.
Lo grave son las biografías 'oficiales' de Camacho, la pasionaria, el Che y tantos otros. Biografías como para beatificarlos a todos. La falsedad sectaria llevada a los textos que pretenden 'hacer historia' cuando, mintiendo y obviando, hacen doctrina y propaganda.
Saludos "camaradas" :-)

Natalia Pastor dijo...

Bucan:

A día de hoy me resulta increible que hacer apología del comunismo no esté penado en España, y por ejemplo,del nazismo,sí.
Si pusieramos en una balanza los daños y el mal causado por una u otra ideología es evidente que el comunimo es la mayor lacra que ha padecido (y padece) la humanidad.
Cien millones de muertos es el rastro de sangre y crimen que jalonan la ideología más mortifera jamás conocida.


Adán:

Gracias.

Natalia Pastor dijo...

Carlos Fdez de Ocón:

El revisionismo y el maquillaje de las biografias de todos estos sujetos, forma parte de la mentira permamente, de la manipulación destinada a reescribir una historia, una "Memoria histórica" que no se ajusta en nada a la realidad de lo acaecido en su momento.
¿Os imagináis el día que muera Carrillo, cuales serán las loas al genocida de Paracuellos?.

alberto daza dijo...

Hay un hecho incontestable, querida Natalia, y es que ésta izquierda vive en una involución constante que no tiene vuelta de hoja.
Cierto es que Camacho es un producto de su época y como tal hay que considerarlo.
Con sus luces y sus sombras, por lo menos fue coherente.

Lo que ds pavor es ver a estos nuevos antifranquistas de salón, a estos cantamsñanas de nuevo cuño, castristas con corbatas de "Hermés", hacer apología del comunismo a estas alturas de siglo, como si nada hubiera pasado y la nieve fuera virgen e impoluta bajo sus pisadas.
Eso es lo que da miedo.

Saludos cordiales.

Natalia Pastor dijo...

Alberto Daza:

Ese es el drama : que los asistentes a ese homenaje a Camacho representan esa amenaza, La maquinaria de una ideología atroz y sanguinaria que a a día de hoy sigue presente entre nosotros.

Que a estas alturas, como tu bien señalas , pretendan que "la nieve fuera virgen e impoluta bajo sus pisadas", es un oximoron.
Cien millones de cadáveres son la muestra, la huella, de a donde nos llevan los planteamientos que ayer jaleaban cantando "La Internacional" puño en alto.

José Luis Valladares Fernández dijo...

Cuando uno muere, querida Natalia,desaparece todo lo malo y los que quedan no ven más que virtudes en el difunto. Marcelino Camacho, me imagino, habrá tenido otras virtudes, pero no las que quieren atribuirle: ni es un sindicato moderno el que él fundó, ni fue un extraordinario defensor de las libertades por el hecho de luchar contra el franquismo. La doctrina comunista no es precisamente un dechado de libertad. Todo lo contrario, trata de imponer por las brabas sus dictados y sus maneras de ver las cosas. En cuanto a la modernidad del sindicato, nada de nada; le dotó de unas estructuras que ya olian a rancio porque eran propias de etapas ya pasadas de moda.
Si acaso, si acaso, concedamosle a Camacho la virtud de obrar en coherencia con sus equivocadas ideas.
Saludos cordiales

Urdanautorum dijo...

Natalia, opino como tú.
Por lo menos este hombre fue coherente con su forma de vida y no tenía las manos manchadas de sangre como La Pasionaria.
En cuanto a su legado, basta ver la corporación sindical de CCOO y a sus convincentes piquetes de información.
Lo que más me choca del PC y similares es su desfachatez de autoproclamarse "demócratas".

Natalia Pastor dijo...

Jose Luis:

Es que decir que un comunista es un luchador por las libertades,...pues en fin.
Estas panoplias sonrojantes que pretenden almibarar a quien no era otra cosa que un estalinista, pues producen vergüenza ajena.
Eso sí: nadie puede negarle su coherencia.
Sobre todo si los comparamos con la calaña de sus herederos, los Toxo y cía.


Urdanautorum:

La coherencia de Camacho nadie la discute.
Lo que es patético es el intento de convertir a un estalinista en un apostol de la libertad.
¿Qué luchó contra el franquismo?.
Pues sí.
Al igual que no hubiera luchado contra una dictadura estalinista.
Una cosa no quita la otra ni hace que los cerdos vuelen.

GFO dijo...

A este paso, el día que fenezca Carrillo lo veremos convertido en una especie de Vicente Ferrer o Teresa de Calcuta travestido.
Es lo que tiene Natalia, este revisionismo con photoshop histórico: que retocan lo que haga falta.

Y así se pasa de ser un furibundo estalinista a convertirse por arte de magia potagia en un luchador por las libertades.
Y a Carrillo le darán a título póstumo el Nobel de la Paz por su contribución en Paracuellos del Jarama...

francisco dijo...

Sucede Natalia, que como dice Guti en su comentario, ese photoshop histórico que retoca lo que haga falta, sólo tiene por objetivo reescribir la historia al modo y manera de los gestores del pensamiento único.
Y en estas andan.
Hacer pasar a Marcelino Camacho- un estalinista radical-, por un "luchador por las libertades", es el último experimento en esta manipulación contínua que se traen entre manos.

Natalia Pastor dijo...

Guti:

Me temo que el día en que acontezca el óbito de Carrillo contemplaremos el lavado de imagen y la ostentación de la sarta de mentiras más brutal jamás oida.


Francisco:

Reescriben la Historia, el pasado, para borrar las huellas de sus mentiras, tropelías e infamias.
Creen que reescibiendo el pasado pueden ganar el futuro.