El caos

Pues si, ya estamos, inmersos en el caos más absoluto. Colas kilométricas en las gasolineras,algunas ya sin combustible y cerradas, atascos brutales en carreteras,autopistas y accesos a las grandes ciudades,oleadas de amas de casa arramplando con víveres para subsistir en un búnker nuclear, sin periódicos,(hoy me he quedado sin EL MUNDO),....
Los transportistas han iniciado una huelga, que amenaza con paralizar el país, mientras Zapatero y sus "medidas potentes", se quedan en agua de borrajas, con el rictus de cartón- piedra de las ocasiones transcendentales, y reclamando "diálogo" a los que están con el agua al cuello, endeudados hasta las trancas y que ya no tienen ganas ni tiempo de escuchar al flautista de Hamelín que vive en la Moncloa.
Y eso, que la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM), haciéndole el caldo gordo al Gobierno y con la camiseta de esquirol puesta, no secundan el paro junto a los palmeros flamencos de UGT y CCOO, cumpliendo el infame papel de traicionar a unos trabajadores de los cuales viven y comen a cuerpo de rey.
El panorama se presenta turbio, por que como decía Julio Andradas en su último post, el Gobierno sigue sin tomar medidas que palien en parte, el problema tanto de los transportistas como de los pescadores, y que no es otro, que dejar de gravar con ese porcentaje de impuestos, los hidrocarburos y combustibles para ambos sectores.
Tanto ocultar la crisis bajo las alfombras de Moncloa,tanto negar lo evidente, tanta huida de la realidad sólo podía desembocar en un estallido social que irá a más y que puede desembocar en situaciones imprevisibles, por la dejadez, desidia y abandono, del Gobierno más nefasto e inepto de la historia de la democracia.
Mientras tanto, la ex oposición y Rajoy, siguen a lo suyo, a preparar su Congreso búlgaro de ratificación del perdedor, y a esperar que escampe.

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