lunes, enero 28, 2013

¿Es ético este tipo de periodismo?


Hace ya dos semanas que El Mundo de Pedro J Rámirez publicó en una portada incendiaria, que el ex tesorero del PP, Luis Bárcenas, había pagado sobresueldos en dinero negro a los dirigentes de la cúpula del partido.

Lo publicado era de una  extraordinaria gravedad. Una información así, de ese calado, amén de ser contrastada con las diversas fuentes, tendrían que estar basadas en pruebas contundentes e irrefutables.
La opinión pública, expectante y escandalizada ante semejante revelación,esperaba ansiosa que El Mundo y su director Pedro J Rámirez publicarían la lista de nombres que habían percibidos los "sobres" de Bárcenas en los siguientes días.

Pero hete aquí, que dos semanas después, ni hay nombres, ni datos, ni listas de sobresueldos, ni nada que se le parezca. No hay una sola prueba, ni una, que demuestre que lo publicado por El Mundo es cierto y no un infundio. A pesar de lo evidente -la falta de nombres -, entre tertulianos y articulistas se sigue trinchando el pavo de los supuestos sobresueldos.




El diario MARCA, también bajo el paraguas de Unidad Editorial y por ende de Pedro J Rámirez,  publica una portada que sacude los cimientos del Real Madrid afirmando que en una comida entre el presidente Florentino Pérez, el director general José Ángel Sánchez y los capitanes -Casillas y Ramos - éstos dieron un ultimatum lanzando un órdago explosivo: si Mourinho sigue, habrá jugadores que pedirán la salida del Madrid.

La noticia no es contrastada con ninguno de los asistentes. Florentino, en comparecencia extraordinaria al día siguiente, tacha la información de "falsa y de mentira absoluta", mientras que el diario, en un ejercicio que traspasa todos los límites de la deontología, insiste en su "información" aun cuando los cuatro asistentes a la comida lo desmientan categóricamente.

Ante esto, surge la pregunta inevitable: ¿Es ético -no digamos ya lícito...- publicar una "información" - en el caso de los sobresueldos del PP una acusación gravísima- de este calibre sin tener una sola prueba?

Decía Roger Wolfe, cuando le preguntaban sobre cierto tipo de periodismo, que sin "pruebas que lo atestiguan, ese tipo de informaciones se basan en lanzar mierda y lavarse las manos".
Desde Hearst hasta hoy, el periodismo no ha depurado como merece los códigos éticos imprescindibles para que una información se base en pruebas irrefutables.

Ante esto, sólo quedan los tribunales como medio de resarcimiento. 


 natpastor@gmail.com

domingo, enero 27, 2013

La caza del portugués


 Desde que llegó hace tres años, José Mourinho se ha convertido en el muñeco de pim-pam-pum, en la diana donde disparar todas las inquinas y vendettas que alberga la prensa deportiva, desde que el portugués decidió retirarles sus sempiternos privilegios.  

Hasta la llegada de Mourinho, la prensa deportiva viajaba en el mismo avión de los jugadores, tenía acceso a los hoteles de concentración, tenían a su disposición a los jugadores cuando los requiriesen, ya fuera para entrevistas personalizadas en diarios o para entrar en programas de radio de madrugada.

El juego desplegado por el Madrid y los resultados espectaculares, frenaron durante un tiempo la cacería y la persecución mediática larvada y que ahora se desarrolla en toda su intensidad.

La campaña que sufre Mourinho no la ha sufrido político, personaje o deportista de ninguna clase a lo largo de la historia. Se han vertido sobre él todo tipo de insultos y descalificaciones; desde "nazi portugués" -como le tildó Carlos Boyero- a la infamia de Roberto Palomar, juntaletras de 'Marca' y contertulio de COPE - ¡qué tiempos,Federico...! -, diciendo que Mourinho es el típico personaje "que se daría a la fuga después de causar un atropello". Los dos se sentarán en un banquillo tras ser demandados por Mourinho.



A los insultos y descalificaciones hay que sumar la campaña de mentiras -una tras otra - cuyo único objetivo - como dijo Florentino Pérez en su comparecencia - es desestabilizar al club y provocar una fractura social en el madridismo que obligue al cese del entrenador.









Un ejemplo de mentira es el caso de Diego Torres (El País), amigo de Valdano, que contó de forma detallada una imaginaria pelea de Mourinho con Esteban Granero delante de todos sus compañeros de vestuario. Posteriormente se demostró que esa pelea fue falsa, una absoluta fabulación del periodista argentino, que quedó en evidencia y con las vergüenzas al aire cuando se comprobó que Granero, para más inri, no estaba ni en Valdebebas el supuesto día de la discusión.

Lo que aquí se dilucida, es -nada más y nada menos -, que un pulso entre una prensa que convirtió al club en su cortijo, que ejercía el derecho de pernada sobre todos y cada uno de los estamentos de la institución y un entrrenador no dispuesto a doblegarse. Un entrenador que no come con periodistas, que no toma copas con ellos, que no les pasa la mano por el lomo, que no filtra información del vestuario ni entra de madrugada en programas de radio para mayor gloria y audiencias del comunicador de turno.

Esto no es nuevo. José María García ya intentó un pulso con Florentino Pérez en su primera etapa, con la recalificación de los terrenos de la Ciudad Deportiva como telón de fondo. De aquella campaña atroz que pocos recuerdan, sólo queda el saldo de un rastro de querellas -ganadas por Florentino - y un periodista de voz aflautada que de vez en cuando -cual espectro- aparece en alguna entrevista nostálgica relatando batallitas para nietos.

La ética debe acompañar siempre al periodismo como compañera de viaje. Los comportamientos y campañas basadas en intereses espúreos,bastardos, corporativistas, envilecen y prostituyen la profesión de periodista y ésta se convierte entonces en canallesca impostura, en pura mentira e infundio, en calumnia continuada y grosera.

 natpastor@gmail.com

domingo, enero 20, 2013

Tangentópolis cañí


En Italia, la palabra tangente se utiliza para referirse al soborno, la comisión. El preludio de esta orgía de corrupción se situa en Milán, cuando se produce la detención de un funcionario socialista, un tal Mario Chiesa, pillado con el carrito del helao en el mismísimo momento en que cobraba un soborno. 

Chiesa se había embolsado un soborno de siete millones, la mitad de lo estipulado por el propietario de una pequeña empresa de limpieza que, al igual que otros proveedores, debe hacer su contribución, la mordida, el 10 por ciento del contrato, que en este caso ascendía a 140 millones.

Chiesa,asustado tras su detención por los carabinieri, cantó La Traviata en el interrogatorio y explicó, con pelos y señales, que el sistema de soborno estaba mucho más extendido de lo que se creía.  
Según sus declaraciones, el soborno se había convertido en una especie de impuesto, que forma parte de la gran mayoría de los contratos, con todos los políticos y los partidos de todas las tendencias,y -por supuesto- con aquellos que estaban en el gobierno como la Democracia Cristiana de Giulio Andreotti y el Partido Socialista.


La Democracia Cristiana subestimó el peso y las consecuencias políticas de lo que pasó de ser la detención -uan más-, de un político corrupto a una macrooperación denominada Manos Limpias,con el fiscal Antonio Di Pietro al frente. El máximo responsable de los socialistas, Bettino Craxi por cierto,íntimo amigo de Felipe González...-, acusó a la fiscalía de Milán de Di Pietro de encontrarse detrás de un proyecto político y encabezó un frente de los partidos tradicionales frente al fiscal.

 
Tras las elecciones, la República Italiana se derrumbaba en medio de la indiferencia popular y el fiscal Di Pietro se convertía en el látigo castigador de los corruptos. A partir de ahí, se inicia una tormenta de detenciones que dura dos años de escandalosas cataratas de acontecimientos que convirtieron la trama de las Tangentópolis en una causa general contra los partidos políticos,en Italia, la ruptura y quiebra del sistema de partidos tradicional y la llegada al escenario político de Silvio Berlusconi y el populismo más rampante, que en marzo de 1994 ya había ganado las elecciones. 


Los Pujol, Urdangarín, Diego Torres, el caso Malaya, Duran Lleida y la trama Pallarols,el ático de Ignacio González y las sospechas que se ciernen, Bárcenas, el escándalo de los EREs falsos en Andalucía... el hedor es tan profundo que el mismísimo The New York Times, está preparando ya un reportaje sobre la corrupción en España para esta semana.
La gota que ha rebaso el vaso ha sido el último escándalo conocido, el de Luis Bárcenas, que está haciendo tambalearse al PP tras las últimas revelaciones respecto a sobres con dinero circulando por Génova.


Desde la Corona, pasando por Ayuntamientos, CCAA, jueces, diputados, senadores,sindicatos... no hay una sola institución del Estado que no se haya visto salpicada por casos de corrupción en un nivel u otro.

El ciudadano de a pie asiste atónito a la conversión de lo que un dia pareció una democracia, en una auténtica cleptocracia dentro de un pais que tiene casi seis millones de parados, los comedores de Cáritas abarrotados y uan perspectivas de futuro tenebrosas.

Lo que está en juego no es el futuro político de tal o cual partido político, del yerno del Rey o de un tesorero con 20 millones de € en Suiza.

Lo que se juega en al mesa es el mismísmo sistema de partidos que se consagró en la Transición.
España está a cinco minutos de sufrir el cataclismo que sufrió Italia con Tangentópolis.

jueves, enero 17, 2013

Garrotazos



No hay un cuadro que represente tan fidedignamente la esencia de España y de los españoles como el "Duelo a garrotazos" de Goya.
El cainismo atroz, la esencia autodestructiva y fratricida que nos acompaña desde los albores de nuestra Historia. Un pais dual, atávico, fronterizo, de blancos y negros, de maximalismos absurdos, de rencores milenarios.
España y los españoles reflejados en esos dos hombres que blanden sus garrotes dispuestos a abrirse la crisma enterrados hasta las rodillas en el fango.
Que pena de pais.

natpastor@gmail.com

viernes, enero 11, 2013

Del Cantón a Mas



El 11 de febrero de 1873, el rey de España, Amadeo de Saboya, renunciaba al trono. La Asamblea proclamó la Primera República y eligió como Presidente a  Estanislao Figueras.
El 12 de julio de 1873 estalló la denominada Revolución Cantonal que más tarde se extendería por Valencia, Alicante, Cádiz... y que reclamaba un federalismo de carácter radical  tratando de establecer una serie de cantones (el antecedente de lo que hoy son las autonomías...) independientes del Gobierno central, que con posterioridad, se federarían libremente.

Los cantonistas toman el Ayuntamiento, el Gobierno Civil, y nombran una Junta que proclama la independencia del Cantón de Cartagena. Todos los buques de la flota española amarrados en el puerto cartagenero se unen a la proclama.
Las tropas gubernamentales son rechazadas en su intento por instaurar el orden y los revolucionarios cantonistas suman a la revuelta a nuevas poblaciones y, utilizando la flota, amenazan a las poblaciones costeras para que paguen un impuesto que les permita financiarse.

La presión del sitio estrangula el levantamiento y los revolucionarios contactan con el gobierno de los Estados Unidos -sí,han leido bien...- solicitando su ingreso en la Unión -¿les suena?.Ahora se trata de la UE...- y, además, le piden ayuda para mantener su independencia frente al poder centralista -hay terminologías que nunca cambian...- de Madrid. El presidente Ulysses S. Grant, no pudo llegar a estudiar la surrealista propuesta por falta de tiempo; seis meses de asedio y bombardeos obligan a Cartagena  a rendirse el 12 de enero de 1874.




ERC y CiU  han redactado la declaración de soberanía de Cataluña que será aprobada por el Parlament el próximo 23 de enero y que supone -nada más y nada menos- que la intención de romper con España y proclamar unilateralmente un Estado catalán tras la celebración de la consulta, prevista para 2014.

 Esa intención de «declarar la soberanía democrática del pueblo de Cataluña como sujeto político y jurídico», vulnera  el artículo 1 de la Constitución que señala que «la soberanía reside en el pueblo español».
A partir de ahí, lo que se pretende mediante este órdago no es otra cosa que eludir e ignorar las leyes aprobadas por el Congreso de los Diputados, ya que dejarían de tener vigencia en Cataluña dado que su aplicación debería sometarse a la voluntad del Parlament.

Decía Margaret Thatcher, que la "tibieza sólo trae desgracias y tragedias". Hasta hoy, el Gobierno de Rajoy se ha mostrado timorato y pusilánime hacía el desafio nacionalista catalán.
Ante esta declaración de "soberanía de Cataluña" que supone la confrontación total, Rajoy debe ser inflexible.
O se frena a Mas de manera contundente, o me temo que al final no le quedará a Rajoy otra que emular al Gobierno de la República tal y como queda reflejado en  el Diario Oficial del Ministerio de la Guerra del 7 de octubre de 1934...





natpastor@gmail.com